
La Fiscalía General de la Nación dio a conocer nuevas pruebas sobre el caso de corrupción en la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), destacando la existencia de la llamada “puerta blanca” de la Casa de Nariño.
(Vea también: Olmedo López pagaría 6 años y 2 meses de cárcel por caso de corrupción de la UNGRD)
Esta entrada permite ingresar a distintas oficinas de la Presidencia de la República sin dejar registro alguno, un detalle que ha tomado relevancia por las reuniones no documentadas que allí tuvieron lugar en medio del escándalo de corrupción que sacude a varias figuras del gobierno.
Durante la audiencia contra Carlos Ramón González, quien hasta hace poco era el director del Departamento Administrativo de la Presidencia (Dapre) y colaborador directo del presidente Gustavo Petro, la Fiscalía presentó imágenes de videovigilancia que muestran la utilización de este acceso exclusivo. La atención se centra, sobre todo, en un encuentro entre Sandra Ortiz, exconsejera presidencial para las regiones, y Olmedo López, exdirector de la UNGRD.
La investigación reveló que, pocos minutos antes de una reunión con Carlos Ramón González, Sandra Ortiz y Olmedo López fueron captados interactuando discretamente en el pasillo junto a la “puerta blanca”. Según la explicación de la fiscal María Cristina Patiño, Ortiz abordó y tomó del brazo a López para hablar en privado, tal como este lo había relatado anteriormente ante las autoridades.
La Fiscalía reveló videos de la llamada “puerta blanca”, la entrada secreta en la Casa de Nariño para llegar a despachos de Presidencia sin dejar registro y donde se encontraron los protagonistas de la UNGRD. https://t.co/if1kX8q65f pic.twitter.com/40oY03zh7p
— Revista Semana (@RevistaSemana) June 6, 2025
El testimonio y las imágenes presentadas por la Fiscalía sugieren que dicho encuentro fue clave para coordinar la entrega de sobornos a altas figuras del Congreso, específicamente a Iván Name, entonces presidente del Senado, y a Andrés Calle, presidente de la Cámara de Representantes. Según los señalamientos, Sandra Ortiz habría ejercido el papel de intermediaria y “mensajera”, cumpliendo instrucciones de González para materializar la entrega de aproximadamente 3.000 millones de pesos.
El caso tomó mayor gravedad al conocerse que Carlos Ramón González enfrenta acusaciones formales de peculado, cohecho y lavado de activos. Aunque el exfuncionario no admitió estos cargos, la Fiscalía solicitó una medida de aseguramiento privativa de la libertad, argumentando el riesgo de fuga y la posibilidad de afectar el proceso judicial. Hasta la fecha, el paradero de González es incierto, razón por la cual las autoridades buscan garantizar su comparecencia ante la justicia.
El hecho de que estas reuniones se llevaran a cabo a través de un acceso sin registros oficiales plantea interrogantes sobre la transparencia en los procedimientos internos del gobierno y la dificultad de rastrear actividades potencialmente ilícitas dentro del Palacio Presidencial.
La utilización de accesos restringidos en la Casa de Nariño pone en evidencia el funcionamiento de los esquemas de corrupción estatal, por lo menos en el Gobierno actual. Sin embargo, la existencia de dicho lugar deja muchas dudas entre la opinión pública ante dicha evidencia de secretismo en los altos poderes.
* Pulzo.com se escribe con Z
LO ÚLTIMO