La función de sus hijos era reclutar a otros niños para volverlos consumidores frecuentes y obligarlos a comprar la mercancía ilegal que vendían, principalmente en los parques de Soacha y Ciudad Bolívar, informó Noticias Caracol.

En menos de un año, por lo menos 30 jóvenes, entre los 10 y 17 años, cayeron en las redes de esta banda de delincuentes, agregó el noticiero.

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De acuerdo con el informativo, la pareja le pedía a su hija de 15 años que usara sus atributos físicos para llamar la atención de los niños, lo cual hacía a plena luz del día.

Las autoridades capturaron al padre de los menores, igual que a otros 4 integrantes de la organización. Mientras avanza la investigación, la mamá de los niños fue dejada en libertad, señaló Noticias Caracol.

El coronel Gustavo Verdugo, comandante operativo de la Policía de Cundinamarca, aseguró a ese medio que a los detenidos se les acusa por los por los delitos de concierto para delinquir, y tráfico, fabricación y porte de estupefacientes.