La inseguridad en Bogotá y en todo el país se está convirtiendo en un verdadero dolor de cabeza para las autoridades, que intentan controlar esta situación con estrategias efectivan que reduzcan los indices de hurtos y criminalidad; sin embargo, parece que esos planes no están funcionando.

Así quedó evidenciado en un caso particular que se presentó en el municipio de Samaná, Boyacá, cuando un hombre fue capturado por la Policía al ser sorprendido robándose dos celulares en un establecimiento comercial; sin embargo, lo que sorprendió a los uniformados fue la reacción del sujeto al ser llevado a la estación y encontrarse con su víctima. 

Según informa Noticias Caracol, el hombre se notaba muy asustado por lo que le podría pasar, pues sabía que se le podía ir hondo su accionar de robar. Al llegar a la comisaría, la persona a la que hurtó lo estaba esperando y su primera reacción fue ponerse a llorar, implorándole a la víctima que no alargara más este caso. 

 “No me ponga el denuncio, perdóneme, por favor. No lo vuelvo a hacer”, fueron las palabras del hombre. 

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De inmediato, la persona afectada y totalmente disgustada le respondió que ella trabaja honradamente como para que inescrupulosos la roben: “Eso dicen muchos y lo vuelven a hacer”. 

Sin embargo, el ladrón se vio muy afectado y desesperado por la situación, por lo que decidió ofrecerle dinero para que no lo denunciara: “¿Sabe que estoy esperando yo?, que me paguen la quincena. El viernes me pagan y me voy de este pueblo”. 

Las suplicas no surgieron efecto y la mujer decidió denunciar a este hombre, por lo que fue presentando ante un juez que definirá su situación judicial. Por el momento, el sujeto permanece preso.