Al presidente Gustavo Petro le están pidiendo poner más que sus ojos y “datos históricos”, acciones y propuesta concretas para ayudar a jóvenes en Buenaventura, que hoy como hace años, están en riesgo por la violencia.

El líder juvenil, Gustavo Castillo le hizo un llamado al presidente. Recordó que, “hace 18 años fueron asesinados 12 Jóvenes del barrio punta del Este en Buenaventura; hace un año el Pte @petrogustavo recibió los Mandatos de la Juventud del Pacífico; pero las madres siguen llorando, los jóvenes siguen muriendo”, escribió.

La tragedia de hace 18 años en el puerto sobre el Pacifico en el Valle del Cauca. Foto: archivo/ @Afrocolm
La tragedia de hace 18 años en el puerto sobre el Pacifico en el Valle del Cauca. Foto: archivo/ @Afrocolm

 

Su mensaje está dirigido al mandatario nacional: “Sr. Pte el cambio se construye con la juventud!”

Sin embargo, aunque Petro leyó el trino, su respuesta no fue la esperada. “Citaron a los jóvenes a jugar un partido de fútbol, y luego los asesinaron. Eran 12 muchachos negros del barrio Punta del Este de Buenaventura. Los asesinos eran los paramilitares. Que la Unidad de víctimas construya allí el monumento a la paz: el barrio más hermoso de la ciudad”, respondió.

“No es con más monumentos”, le responden al presidente de los colombianos.

El mismo Castillo, le llamó la atención al mandatario colombiano. “Sr. Presidente, por favor lea el Tweet completo y juntos con la juventud del pacífico hallaremos caminos que nos permitan resolver el problema de fondo”, fue el llamado.

La tragedia de hace 18 años en el puerto sobre el Pacifico en el Valle del Cauca. Foto: archivo/ @Afrocolm
La tragedia de hace 18 años en el puerto sobre el Pacifico en el Valle del Cauca. Foto: archivo/ @Afrocolm

El presidente estuvo en Buenaventura hace unos días, revisaron proyectos en materia deportiva, de oportunidades para jóvenes y de sanidad, como la instalación de un gran tanque para el suministro de agua potable.

Además, están tratando de salvar el diálogo de paz urbana entre shottas y espartanos. Sin embargo, las balaceras siguen atemorizando.

“La tensa calma de estas noches en Buenaventura se vuelve escabrosa, terrífica, dolorosa, incierta y de un temor que agobia, encierra y espanta a sus habitantes y a quienes podrían llegar a buscar u ofrecer oportunidades”, se lee en redes sociales de medios locales y portales digitales.