Jaime Pumarejo, alcalde de Barranquilla, fue visto muy enojado este viernes en un evento en uno de los barrios de la ciudad. Durante la entrega de unos trabajos de alcantarillado, el mandatario tuvo algunas confrontaciones con los asistentes a la socialización.

El hecho se registró en el barrio La Cangrejera, uno de los sectores más vulnerables de la capital del Atlántico. Pumarejo recibió fuertes críticas de la comunidad, pues le dijeron que cumplió a medias las promesas que hizo en campaña y que hasta el momento, aún tienen problemas graves que necesitan de una solución eficiente.

Incluso, el mandatario local aseguró que sintió un ambiente hostil al momento de arribar al evento: “Cuando llegué y me bajé le dije a mi equipo que yo me sentía en la iglesia. Estaba todo el mundo calladito, todo el mundo serio. Me senté ahí y yo pensé que me iban a dar la hostia y me iban a imponer la ceniza”, comentó.

Los ánimos empezaron a caldearse cuando una habitante de la zona lo interrumpió en su discurso y le reprochó por no recordar los problemas sociales del barrio, a lo que el alcalde le respondió: “Tú me estás diciendo que yo me olvidé de algo, por lo cual estamos aquí (…). Yo no me he olvidado, mi vida, yo estoy aquí”, comentó.

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Finalmente, la situación se salió de control cuando Pumarejo no pudo contenerse al comentario del líder comunal que se fue de frente y le recalcó que no tenían nada que agradecerle, ya que según él, ellos pagan impuestos y es deber del Distrito dar respuestas a los problemas. Además, aseguró que se sentían usados porque solo los visitó en época electoral, lo que desató la furia del mandatario. 

“Discúlpame tú papito, porque yo no estoy hablando de elecciones. Aquí yo soy el alcalde de Barranquilla por dos añitos más. No te dejo hablar, ¿sabes por qué? Porque estás diciendo pendejadas. A mí no me venga con cuentos electoreros, papito”.

Al terminar estas palabras, el alcalde abandonó la tarima y se fue del evento sin responder más preguntas.

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