La emergencia ocurrió luego de unas 8 horas de diligencia ante la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), el jueves en la tarde, y fue el magistrado Gustavo Salazar el que advirtió que el general en retiro Rito Alejo del Río estaba presentando quebrantos de salud.

“Paremos un momentico. ¿Se encuentra mal, señor Rito Alejo?”, preguntó el magistrado, que de inmediato pidió suspender la diligencia debido a que el exmilitar no estaba en condiciones de seguir.

“Voy a pedir que llamen a enfermería y activen los mecanismos, y se suspende la diligencia siendo las 4:04 de la tarde”, advirtió Salazar, mientras que Del Río se cogía la cabeza y se movía de forma desesperada en su silla.

Fue ahí cuando el personal médico chequeó al interrogado y procedió a trasladarlo en una ambulancia, y medios como W Radio aseguraron que el exmilitar “sufrió un infarto” y que fue internado “en cuidados intensivos (UCI)”.

Lee También

El percance de salud lo sufrió el excomandante de la Brigada 17 del Ejército cuando daba su testimonio sobre las masacres en el Urabá y el exterminio de integrantes de la Unión Patriótica.

Sobre este último caso, Del Río aseguró que aunque desde el Ejército y la Policía “se trató de tomar contacto con ellos, siempre fueron esquivos”, y que por eso no fue efectiva la protección que se les quiso brindar.

“Con la Unión Patriótica no había la confianza con la Fuerza Pública para decir, le recibo la protección”, señaló ante la JEP.

General (r) Rito Alejo del Río habla de paramilitarismo y masacres en el Urabá

En cuanto al paramilitarismo, el exoficial contó que eran “grupúsculos, estaban diseminados en todas partes, prácticamente estaban en toda el área” del Urabá, y habló de las mascares que se cometieron en su jurisdicción.

El compareciente aseguró que estos asesinatos se redujeron “bastante, pero que no se erradicó” del todo este flagelo. “Mejor dicho, yo evité muchas masacres con la movilidad de las tropas”, detalló.

Así anunció la JEP lo sucedido con el exgeneral, del que, según La W, se encuentra “estable” en el Hospital Militar de Bogotá.