Era oriundo de Manizales pero vivía en Bogotá hace varios años. Trabajaba instalando redes eléctricas, había cumplido 22 años el pasado 14 de enero y era un joven “calmado pero alegre”, le dijo su hermana Sandra Londoño Cárdenas a El Tiempo.
Y agregó: “Se la pasaba mucho en la casa de mi mamá, no era callejero ni toma trago. Sí se tomaba sus cervezas a ratos, pero no para emborracharse. Él era muy responsable con su trabajo”.
A Cárdenas lo encontró el conductor del taxi al que se subió con otros dos hombres y una mujer, aparentemente venezolanos, que simularon que estaba borracho.
Cuando terminó la carrera, las otras tres personas salieron corriendo y abandonaron a la víctima, según el testimonio del taxista.
Cárdenas estaba indocumentado pero sí tenía con él una tarjeta de Transmilenio que ayudó a las autoridades a identificar el lugar en el que trabajaba para contactar a su familia.
El Tiempo agrega que Margarita, mamá del joven, se enteró de la muerte de su hijo porque a un familiar lo contactaron por Facebook.
Hace pocos meses dejó de vivir con su madre y vivía solo en el barrio El Paraíso, en la localidad de Ciudad Bolívar. También tenía una relación sentimental, agregó el medio.
