De acuerdo con la investigación, los miembros del Ejército Nacional capturados en Tame (Arauca) son siete soldados profesionales y un cabo segundo, adscritos al Batallón Terrestre Número 29 de la compañía Búfalo.

El caso ocurrió el pasado 8 de marzo de 2018 cuando fue asesinado el campesino Ciro Alfonso Manzano Ariza, y herido Andrés Fabián Salcedo Rincón, “en hechos que según la indagación serían ajenos a un enfrentamiento”, explicó la Fiscalía en un comunicado.

“En el mismo hecho fueron detenidos Juan Pablo Salcedo Rincón, excombatiente de las Farc, y el particular Dumar René Chaparro Rincón. Las cuatro víctimas fueron señaladas  de hacer parte de una organización criminal”, agrega el organismo acusador.

Si bien la Fiscalía no explicó si esta muerte se trató de un ‘falso positivo’, el hecho de que diga que no hubo tal “enfrentamiento” como se aseguró en un principio ha dado pie para que se investigue si se trató de una ejecución extrajudicial.

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Incluso, Caracol Radio informó que las víctimas de esta arremetida militar eran familiares de un desmovilizado de las Farc, y que los uniformados habrían disparado a “quemarropa”.

Los ocho militares detenidos son el cabo segundo Manuel Esteban Torres Hernández, así como los soldados Siber Estone Ortiz Rivera, Brayan Osorio Molina, Miguel Ángel Ortiz Olivero, Juan Gabriel Quinaya, Nicolás Ortiz Tarachez, Antonio Ospina Frauder y Jhonatan Pacheco Contreras.

Sobre todos ellos pesan las acusaciones de “homicidio agravado” y “tentativa de homicidio agravado”.

El Ejército, por su parte, dijo en un comunicado que “respeta y acata” las decisiones que determine el juez sobre las acusaciones contra los uniformados.