Por más de dos horas se llevó a cabo la diligencia del incidente de reparación integral de forma virtual, pero no se logró una conciliación.
El juez reconoció como víctimas a varios integrantes de la familia de Ilse Ojeda, la sargento chilena que fue asesinada en Santander, en el 2019.
Entre ellos están los padres, una hermana, tres hijos y dos nietos que, contó Vanguardia, piden una indemnización de 363.410.400 pesos por perjuicios morales y materiales.
Sin embargo, Juan Valderrama, que estuvo acompañado de Flor Alba Cely de Vera, su abogada que ha sido criticada por el manejo del caso, notificó al juez que no tenía cómo responder por ese monto para reparar a las víctimas.
El diario regional aseguró que la defensa de Valderrama, condenado a 36 años y seis meses por el crimen, propuso “una reparación simbólica de perdón y disculpas”.
Como no fue posible llegar a un acuerdo, el juez declaró que fracasó la conciliación y fijó una nueva audiencia para el 3 de mayo de 2022 a las 8:00 a.m.
Si en esa diligencia las dos partes no logran una concertación, será el juez quien falle el monto total por los daños causados de Valderrama a la familia chilena.
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