Empresarios de Colombia y Venezuela se reunieron este lunes en la ciudad venezolana de San Cristóbal, estado Táchira, para preparar el terreno ante una inminente reapertura de la frontera entre ambos países, cerrada para vehículos desde 2015.

El gobernador de Táchira, el oficialista Freddy Bernal, explicó en un video que compartió en redes que el encuentro lleva por nombre Acuerdo de la Frontera, y que participan empresarios y autoridades políticas de ambas naciones.

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“Es un evento muy esperado en función de la integración, de la unidad, de la apertura de fronteras, de profundizar lazos de hermandad entre los pueblos”, dijo Bernal, acompañado por ‘Rubén Zamora’ y Wilfredo Cañizales, representantes del Pacto Histórico, coalición con la que Gustavo Petro ganó la presidencia de Colombia.

Un detalle que llamó la atención de esos encuentros es la forma en que Bernal presenta a ‘Zamora’, cuyo verdadero nombre es Emiro del Carmen Ropero Suárez, que fue negociador y firmante del Acuerdo de Paz con las Farc, ayudó a la organización del Pacto Histórico en Norte de Santander y fue promovido como candidato al Senado con el aval de Colombia Humana.

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“Nos encontramos aquí en la Residencia de Gobernadores del estado Táchira. Nos acompañan el comandante ‘Rubén Zamora’ y el compatriota Wilfredo Cañizales, ambos de la coordinación de Pacto Histórico en el Norte de Santander. Y es el preámbulo de un evento internacional de empresarios que se ha denominado el Acuerdo de Frontera. Comandante ‘Rubén Zamora’, qué expectativas se tienen con respecto al encuentro”, fue la forma en que Bernal presentó a uno de sus invitados.

La denominación de “comandante” aplicada a una persona desmovilizada en virtud de los acuerdos de paz, y en el contexto de las recientes elecciones presidenciales que permitieron la llegada del izquierdista Petro al poder y que demuestran que Colombia es un país civilista y democrático, no deja ser, por lo menos, extraña.

“Comandante”, según el diccionario de la RAE, hace referencia a fejes militares, una condición que, al menos en Colombia, ‘Zamora’ no tiene. Pero el gobernador del estado Táchira lo ve y lo presenta así, otorgándole una curiosa posición de mando castrense. ¿Cómo calificarán entonces en Venezuela a las autoridades constitucionalmente establecidas en Colombia?, se podría preguntar cualquier ciudadano.

Además de ‘Zamora’ y Cañizales, el gobernador tachirense Bernal detalló que toda una “comisión de muy alto nivel” integrada por senadores, políticos y representantes gremiales participaron en la actividad. El encuentro fue organizado por la mayor patronal de Venezuela, Fedecámaras, a través de su seccional en el estado Táchira, junto al Comité Intergremial del Norte de Santander.

Expectativas por reapertura de frontera

En otros comentarios, Bernal aseguró que, con la reapertura de la frontera, “habría una activación de unos 4.000 millones de dólares, generando en principio unos 3.000 empleos directos en Venezuela, con proyección de unos 20.000 empleos en los próximos cuatro años”.

El intercambio comercial entre Venezuela y Colombia, que rozó los 7.200 millones de dólares en 2008, se desplomó con el cierre parcial de la frontera en 2015 y total en 2019. La Cámara de Integración Económica Colombo-venezolana (Cavecol) estima proyecciones de entre 800 millones y 1.200 millones de dólares para este año, después de que bordeara solo 400 millones en 2021.

La reapertura de la frontera traerá “mayor estabilidad” a los habitantes de regiones fronterizas, con “más de 3.000 empleos que aliviarán la situación de precariedad” en estas zonas, comentó a la AFP el presidente regional de la patronal de empresarios Fedecámaras en Táchira, Maximiliano Vásquez.

Tiziana Polesel, presidenta del privado Consejo Nacional de Comercio y Servicios (Consecomercio), fue prudente al ser consultada sobre proyecciones de recuperación comercial. “Hay que entender que cuando las relaciones comerciales se interrumpen es muy complicado retomarlas. Ahora es necesario empezar de cero”, dijo Polesel. “No va a ser lo rápida que quisiéramos”.

Caracas rompió relaciones con Bogotá en 2019, luego de que el gobierno saliente de Iván Duque reconociera al líder opositor Juan Guaidó como presidente encargado de Venezuela, desconociendo la reelección de Nicolás Maduro un año antes, al tacharla de “fraudulenta”.

Petro ha establecido un contacto con el régimen venezolano con el propósito de abrir la frontera común y “restablecer el pleno ejercicio de los derechos humanos” en esta transitada zona limítrofe.

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