Un caso aberrante de intolerancia se registró en el sur de Bogotá, donde en un inquilinato hubo una fuerte agresión de unos arrendatarios que llevaban varios días de fiesta en una de las habitaciones del lugar y, pese al reclamo de los otros habitantes del sitio, no le bajaron el volumen a la música y atentaron contra la tranquilidad del inmueble, según informó Tropicana y Citytv

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Los vecinos de estas personas decidieron llamar a la dueña de la vivienda, quien es una adulta mayor y que además tiene una hija de 28 años en condición de incapacidad. Cuando la señora fue hacerles el reclamo, los inquilinos enfiestados reaccionaron agresivamente y les propinaron una golpiza a las dueñas del sitio, de acuerdo con la emisora.

De hecho, la que llevó la peor parte fue la joven en condición de incapacidad, pues según la cadena radial recibió nueve puñaladas por parte de estas personas, de las que se dijo eran extranjeras, aunque no se reveló sus nacionalidades.

La señora, que es de la tercera edad, también recibió varios golpes y ambas se encuentran en el hospital de Meissen en delicado estado de salud, de acuerdo con el citado medio. 

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Lo que se sabe es que estos sujetos abandonaron el lugar y se fueron debiendo dinero del arriendo. Ahora, las autoridades están tras el paradero de los inquilinos para dar con sus capturas mientras que las dos mujeres batallan por salvar sus vidas.