Esta mujer barranquillera “reclutó” a los 16 universitarios (recientemente capturados) y les ofreció la cantidad mínima de dinero para que suplantaran en las pruebas de admisión a unos jóvenes inscritos en el proceso de selección de la Universidad del Magdalena.

Lo anterior, de acuerdo con la declaración del coronel Gustavo Berdugo, comandante de la Policía de esa ciudad, citado por El Heraldo:

“Ella les pagaba [a los ‘pilos’] 2 millones 500 mil pesos y cobraba 24 millones de pesos a los familiares que querían que sus hijos estudiaran medicina en esa universidad”.

El pago solo se efectuaba si los impostores —la mayoría becados por sus instituciones o por el programa del Ministerio de Educación ‘Ser pilo paga’, debido a su alto nivel intelectual— pasaban las pruebas de admisión y obtenían el cupo en dicha institución.

Además, el coronel Berdugo reveló en una entrevista con RCN Radio que ‘Yamile’ les garantizaba el viaje con todos los gastos costeados a los suplantadores—entre ellos 6 mujeres, dos profesionales y un menor de edad—, durante los días en los que practicaban los exámenes; en el reciente caso, el fin de semana pasado.

“Ellos [organización] se quedaban con el botín más grande, entre 20 y 22 millones de pesos. En total, cobraban 24 millones por un cupo. Los papás son promotores de este fraude”, aseguró el comandante de la Policía.

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Pese a que la mujer es una cabecilla de la organización delincuencial denominada el ‘Cartel de los intelectuales’, el oficial advirtió en la emisora que este fraude se estaría practicando en otras ciudades como Barranquilla, Cartagena, Bogotá, entre otras.

En esas ciudades estarían los grandes líderes de la estructura criminal que reclutaron a los estudiantes activos de las universidades del Norte de Barranquilla, Los Andes y Externado de Colombia, de la capital.

Sobre esa situación, asegura el coronel Berdugo, ya están haciendo varias investigaciones para desmantelar la banda delincuencial.

Los 16 capturados, inicialmente, fueron procesados por los delitos de falsedad en documento público y fraude. Sin embargo, en el proceso se les investiga por otro delito como concierto para delinquir.

Eso porque en el momento de la detención, los tramposos se identificaron con una contraseña, que mediante la “ayuda de grafólogos, documentólogos y un dactiloscopista”, se evidencia que eran “documento falsos”.

Finalmente, el oficial indicó que los universitarios, de manera inmediata y voluntaria, “decidieron colaborar y entregar la información de cómo llegaron a ese lugar, de dónde venían y por qué suplantaban la identidad de la personas que querían ingresar a estudiar medicina”.

Señalaron a ‘Yamile’ como la responsable del hecho. Según la Policía, “ella los reclutaba aprovechándose de sus situaciones económicas”.