La tragedia por un derrumbe en jurisdicción del municipio de Mallama (Nariño) dejaba hasta este martes por la noche un saldo parcial de 12 personas muertas, cuyos cuerpos fueron recuperados y trasladados a la morgue del municipio de Túquerres.

La búsqueda de más cuerpos, suspendida por la lluvia, se reanudará este miércoles hacia las 6:00 de la mañana. Las autoridades tienen el reporte de denuncias de desaparición de otras seis personas, pero se teme que pueda haber más atrapados, debido a que el alud sepultó a dos establecimientos comerciales, un hotel y un restaurante.

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Jáder Gaviria, director de la Oficina Gestión del Riesgo de Desastres en Nariño, hizo un llamado en Caracol Radio para que los habitantes del sector afectado en Mallama, lo mismo que de municipios como Ricaurte y Barbacoas, que no han evacuado las edificaciones que siguen en riesgo, lo hagan.

“Un llamado a las autoridades locales a detectar los puntos críticos y hacer las evacuaciones por prevención. Estamos en esta segunda temporada de lluvias, donde estos suelos son muy frágiles”, advirtió el funcionario en esa frecuencia radial.

Luego de avanzar en labores de rescate y remoción de escombros, la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (Ungrd) había elevado el reporte inicial de cuatro muertos difundido más temprano el martes.

En las primeras horas del martes una avalancha de lodo y piedras sepultó una posada y un billar de Mallama, una localidad de al menos 7.000 habitantes del departamento de Nariño, próximo a la frontera con Ecuador.

Entre los fallecidos se han identificado ocho mujeres, “algunas venezolanas”, dijo este martes a la AFP Gaviria. Según el funcionario, nueve víctimas fueron rescatadas, dos de ellas “heridas de gravedad” y “se presume que hay más personas atrapadas”.

Brigadas de rescate con apoyo de excavadoras están desde temprano removiendo tierra en busca de más víctimas, mientras intentan habilitar el tráfico por una vía nacional afectada por la emergencia.

Gaviria indicó que el alud fue causado por la temporada de lluvias que afecta a buena parte del territorio colombiano.