El organismo investigador explicó, en un comunicado, que al exalcalde de Bogotá Samuel Moreno lo hallaron responsable de intervenir “indebidamente” en los contratos para la fase 3 de Transmilenio, “los procesos contractuales de malla vial 071 y 072 de 2008” y en la adjudicación de “obras por concepto de valorización, en 2009”.

“Se direccionó el proceso de selección y se entregó información reservada de las licitaciones, antes y durante los procesos; se hacía asignación amañada de evaluadores, cambio de sitios de reunión para las evaluaciones, se impartían instrucciones a los evaluadores y no se hacía la verificación estricta a los requisitos”, informó la Fiscalía General, que cita el escrito de acusación que presentó el fiscal que lleva el caso.

La Fiscalía reveló que los dineros “apropiados irregularmente por el exalcalde Moreno y sus cómplices”, los cuales se perdieron en el denominado ‘carrusel de la contratación’, se direccionaron por medio de una maniobra de “lavado de activos” para sacarlos de Colombia hacia Estados Unidos.

Esta operación contó con “ayuda de firmas de abogados” de EE. UU., y se crearon sociedades por medio de las cuales se compraron “inmuebles en la Florida”, y se invirtió dinero “en un importante proyecto inmobiliario en Miami”.

La Fiscalía dice que encontró “seis sociedades” cuyos beneficiarios “serían los hermanos Moreno Rojas”, y que detectó el proyecto inmobiliario en el cual estarían los dineros del desfalco a Bogotá.

El “monto comercial (del proyecto de apartamentos) es de USD$ 56 millones de dólares, que a la tasa de cambio vigente ascendería a más de $ 168 mil millones de pesos”, dice la Fiscalía.

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Las autoridades colombianas anunciaron que llegaron a un acuerdo con el Departamento de Justicia de EE. UU. para investigar a fondo y “perseguir” estas millonarias inversiones en el exterior.

Actualmente, Moreno Rojas cumple una condena de 24 años de cárcel por irregularidades a la hora de adjudicar contratos para el servicio de ambulancias en la ciudad.