El odontólogo también se declaró inocente, lo que significa que ambos señalados renuncian a la reducción de pena por aceptar los cargos, informa RCN Radio.
El juicio de este martes 26 de octubre se había demorado en comenzar debido a que el odontólogo puso una tutela porque presuntamente le estaban violando derechos fundamentales, que en primera instancia fue declarada improcedente por el Tribunal Superior de Bogotá.
Los argumentos del ente acusador señalan que cuando la excongresista Aida Merlano salió de la cárcel para atender una cita odontológica no tenía los elementos que le ayudaron en su fuga y que estos le habrían sido suministrados por su hija y por el profesional de la salud.
Por su parte, la defensa del odontólogo Cely dijo que la custodia de la prisionera estaba a cargo del Inpec y no era responsabilidad de su defendido.
En este caso se escucharán testigos y declaraciones de los guardias del Inpec que estaban encargados de la custodia de Merlano, antes de que se fugara por una ventana del consultorio, con ayuda de una soga y de una moto, que la recogió una vez pisó la calle.
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El primer testigo fue el dragoneante del Inpec, Luis Ballesteros, que fue enfático en que “los privados de la libertad, como la exsenadora” no se deben reunir con sus familiares en sus citas médicas, como sucedió en este caso, cuando se reunió con su hija Aída Victoria Merlano, destaca El Heraldo de Barranquilla.
El diario costeño cita a la dragoneante Diana Montoya, que dijo que “el odontólogo se comportaba de manera extraña el día de los hechos y que los hijos de la excongresista le empezaron a hablar durante varios minutos mientras la puerta del consultorio estaba cerrada”.
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