En un debate sobre casos de matoneo los colegios de la capital cordobesa, que se hizo en el cabildo de la ciudad, el concejal Alexánder Madrid denunció que algunas estudiantes se acercaron a él para pedirle ayuda con la situación. Asegura que le dijeron:

“Nosotras las estudiantes del Liceo de Montería vamos a los baños y en los baños hay cámaras; y a veces, la persona encargada de llamarnos la atención nos dice: ‘Oiga, niña, usted no vino con licra, vino con calzones. ¿Cómo se dan cuenta?’”.

Madrid se preguntó hasta dónde había llegado “este asunto tan grave” y además mostró fotografías y videos que prueban la denuncia:

El cabildante expresó su preocupación por la posibilidad de que esos videos caigan en manos de particulares y sean mal utilizados. Esto podría afectar a jóvenes, hombres o mujeres, que hayan sido grabados, señaló Montería Radio.

Madrid también llamó la atención de las autoridades locales para que tomaran correctivos y evitaran que esa práctica no se extendiera a otras instituciones educativas.

Por hacer esta investigación y denuncia, el concejal aseguro que fue “declarado persona no grata en el establecimiento educativo”, añadió la emisora.

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Entre tanto, las directivas del colegio indicaron que con esta medida buscaban vigilar conductas inapropiadas de los estudiantes. Sin embargo, para Madrid, los estudiantes y los padres de familia, el colegio violó el derecho a la intimidad de los niños.

Laura Rey, rectora de la institución, considera que no vulneraron el derecho porque las cámaras se instalaron en la zona de lavamanos y no en los sanitarios. “Lavarse las manos es algo público. Una grabación de un niño lavándose las manos en un baño que es comunitario no viola la intimidad”, le dijo a Blu Radio.

La Secretaría de Educación de Montería anunció que investigará la denuncia presentada por el concejal Madrid para determinar el objetivo con el que fueron instaladas las cámaras.

Entre tanto, la madre de una de las estudiantes interpuso una acción de tutela contra el Colegio y un juez de Montería le dio la razón. Por orden judicial, las cámaras fueron desmontadas.