Eso quedó demostrado en el más reciente encuentro de fútbol (este martes), cuando la Selección perdió en penaltis contra Inglaterra y salió del Mundial Rusia 2018, donde las cifras de violencia disminuyeron notablemente.
Por ejemplo, la Policía de Bogotá solo reportó 24 riñas y cero homicidios en la capital, luego de ese importante juego en octavos de final. Aunque no cabe duda de que el número sigue siendo alto.
La diferencia del comportamiento de los hinchas se evidencia si se compara con las cifras del partido contra Senegal, el pasado jueves 28 junio —Colombia se impuso con un marcador 1-0—, que dejó un lamentable saldo de 254 riñas y 3 heridos, según la Policía de Bogotá, citada por RCN Radio.
Para esa misma fecha se reportaron las siguientes riñas en ciudades principales como Bucaramanga (116), Cúcuta (113), Medellín (90) y Cali (63).
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El panorama de violencia no fue mejor en el primer triunfo de Colombia —el pasado 24 de junio que le ganó a Polonia con un 3-0—, pues ese domingo, en la capital se registraron 60 riñas que dejaron una persona muerta y 35 heridos, entre ellos 7 policías, confirmó la misma autoridad en rueda de prensa, en su momento.
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