En febrero pasado se conoció que Erika Pérez se encontraba desaparecida y sus familiares y amigos la buscaban. La mujer era estilista y tenía 37 años de edad. Pidieron ayuda por redes sociales y pusieron la denuncia a las autoridades, pero no daban con su paradero.
El pasado 13 de febrero fue encontrada muerta en las aguas del río Medellín. Las autoridades ofrecieron 80 millones de pesos de recompensa a quien diera información para esclarecer el caso y capturar al responsable.
La Fiscalía tenía bajo sospecha a su novio, Juan Esteban Álvarez Gómez, d 25 años, y después de 18 días lo pudieron capturar en su vivienda, ubicada en el barrio Santa Lucía.
En la audiencia de imputación de cargos se reveló que Érika murió estrangulada, por lo que el sujeto fue imputado por feminicidio agravado y hurto calificado. También le impuso medida de aseguramiento en centro carcelario.
“Capturaron a un hombre que posiblemente puede ser el asesino de nuestra prima. Que resuelvan todo, que si él es el verdadero asesino, que sea castigado con todo el peso de la ley. Si tuvo algún cómplice, que también pague”, manifestó Evelin Pérez, familiar de la víctima.
El CTI estuvo en la casa del presunto asesino de Erika y allí encontró material probatorio: sangre de la víctima y su smartphone. También se dio a conocer que la Policía Nacional tuvo acceso a mas de 30 horas de vídeo de 27 cámaras de seguridad del sector donde Pérez fue vista por última vez.
28 de febrero se materializa la orden de captura. 4/4 pic.twitter.com/poqAEAEGxy
— BG. Javier Josué Martín Gámez (@PoliciaMedellin) March 4, 2022
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