El alcalde de Armero–Guayabal, Medardo Ortega Fonseca, habló sobre los recientes hechos de inseguridad que generan gran preocupación en su municipio, entre ellos se cuenta el asesinato de un menor de 15 años en el corregimiento San Felipe y el hallazgo de una cabeza humana sobre un hidratante de la misma zona.

Aunque se adelantaron consejos de seguridad para abordar los hechos y evaluar las estrategias para reforzar la seguridad, todo se estaría quedando en peticiones.

“Se lo he manifestado al mismo coronel del departamento, que es difícil donde tenemos más de 15 mil habitantes con seis policías, es difícil donde los policías no pueden ir a las 17 veredas porque no tienen un vehículo”, indicó el alcalde.

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Además, ante la poca capacidad de respuesta, se mantienen problemáticas como el abigeato en la zona rural.

“La inseguridad cada día es más difícil, somos un corredor vial que limitamos casi con Caldas y lo que siempre se ve es el microtráfico”, delito que en perspectiva del burgomaestre le está quitando la tranquilidad a los habitantes, pues de ello se desprenden los hurtos.

Señaló que se está a tiempo de contrarrestar la problemática y evitar perder el control de un municipio que es “sano”, por ello, pidió tanto a la Policía Nacional como al Ejército, hacer presencia en las veredas y también en el Parque a la Vida, ubicado en las ruinas de la desaparecida Armero, teniendo en cuenta que es un lugar frecuentado por turistas.

Y es que son varias las situaciones derivadas por la inseguridad; por ejemplo, está el caso en el que el delincuente entró a una vivienda a robar más de un millón de pesos y el propietario lo apuñaló en la garganta y lo mató, narró Ortega Fonseca.

Otros hechos registrados son el continuo hurto del cableado para extraer el cobre, en lugares como el Coliseo y la morgue, al parecer, cometidos por jóvenes que consumen sustancias psicoactivas, “y eso hace que cuando no tienen plata se van a robar al que sea, el mercado de las personas… se ha vuelto delicado el tema en nuestro municipio”.

Ante los continuos flagelos, la Alcaldía tuvo que contratar vigilancia en escenarios deportivos. “Nadie quiere ser celador del cementerio, pero como la morgue queda dentro del cementerio es difícil y complejo el tema de inseguridad que estamos viviendo. Hoy le pedimos encarecidamente al coronel (de la Policía) que nos apoye”.

Finalmente, el Alcalde llamó la atención en que, a pesar de que se adelantan consejos de seguridad departamentales siguen sin ver resultados. “Tengo (radicado) un proyecto de 23 cámaras en la Gobernación, pero no le vemos solución al tema, hablamos y hablamos lo mismo, escuchamos, nos comprometemos y con algunos alcaldes quedamos en que cada uno compraba una moto para darle al Ejército, pero nadie salió con nada”.

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Lo anterior llevó a que, desde la Administración municipal, se decidiera adquirir una camioneta que sería para la movilidad de las unidades policiales.

Trabajo coordinado con CTI y Sijín

Para el consejo de seguridad extraordinario que se realizó con miras a la Semana Santa en el norte del departamento, se convocó a los mandatarios de Honda, Mariquita, Lérida, Armero – Guayabal y Falan.

El secretario del Interior del departamento, Alexander Tovar, informó que en este espacio se construyeron varias acciones como la construcción de un mapa judicial entre el CTI y la Sijín, “para poder avanzar en esas líneas de investigación y poder entregar prontos resultados”.

Asimismo, se orientarán esfuerzos a la prevención, por lo que invitó a hacer “un esfuerzo mayúsculo con las alcaldías, como la ha hecho este Gobierno, que es invertir en educación, salud, cultura, deporte, aprovechamiento del tiempo libre”, con el fin de evitar que los adolescentes y jóvenes caigan en las redes del microtráfico.

‘Atacar estructuralmente el problema’

Por su parte, el coronel Néstor Raúl Cepeda Cifuentes, comandante de la Policía del Tolima, dijo que en el consejo de seguridad se hizo un llamado en el sentido en que la seguridad no es solamente policial, “también tiene que ver con los diferentes organismos de seguridad tanto de territorio frente a todas las secretarías, porque hay que también trabajar en la prevención”.

Añadió que en el caso de Armero – Guayabal, se enviará unidades de apoyo y a la par se seguirá adelantando procesos judiciales “porque hay que impactar estructuralmente el problema”.

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En cuanto a los recientes asesinatos, el Coronel explicó que están relacionados con microtráfico, una problemática que está marcada en Mariquita y se estaría extendiendo hacia Armero – Guayabal, “con la situación especial del atentado contra la vida de una persona, que tenía unos antecedentes y prontuario delincuencial de muchos años”, esto en referencia al ciudadano decapitado.

Redacción Tolima