Bastante dio de qué hablar la idea de la ministra de Minas, Irene Vélez, de comprarle gas al régimen venezolano de Nicolás Maduro, en caso de que Colombia no pudiera autoabastecerse de combustibles. La controversia ocurrió en el marco de un proyecto de ley que se tramita en el Congreso que busca prohibir el ‘fracking’, técnica empleada para extraer gas y petróleo del subsuelo.

Además, la reforma tributaria, que ha despertado el malestar en algunos sectores por gravar bebidas azucaradas y alimentos ultraprocesados, contempla que el impuesto al carbono recaiga sobre los derivados del petróleo y todos los tipos de gas fósil usados para la combustión. Esto por la idea del presidente Gustavo Petro de llevar a cabo una transición a energías limpias y renovables.

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Álvaro Uribe opinó sobre la idea de comprarle gas a Venezuela

Aunque la ministra Vélez echó para atrás esa propuesta de importar combustibles del país vecino, el expresidente colombiano expresó sus reparos con esta posibilidad, teniendo en cuenta la intención del Gobierno de no asignar nuevos contratos de exploración de gas natural. “Hay luces que no alumbran y sombras muy grandes”, dijo Uribe inicialmente, este domingo 21 de agosto en su cuenta de Twitter.

El exmandatario resaltó que, actualmente, Colombia tiene asegurada la autosuficiencia “gracias a la combinación de energías renovables y convencionales” que van encaminadas a la “reducción de emisiones netas”. Sin embargo, y aunque dijo que Venezuela tiene muchas más reservas de gas que Colombia, “la realidad allá no es fácil”.

“Cuando con el [ex]presidente [Hugo] Chávez firmamos el contrato de venta de gas a Venezuela, la mayor contraprestación era el suministro a Colombia después de 2012. Esto no se dio. No sabemos cuántas razones hubo, pero es claro que existen ciertos problemas de gasoductos y de ubicación de los pozos”, relató Uribe.

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El negocio implicaba que Colombia enviaría gas a Venezuela por siete años, tiempo en el que se alcanzaron a suministrar más de 383.000 pies cúbicos por día (mpcd). Posteriormente, la idea era que el país vecino mandara combustible a partir del primero de enero de 2016, en cantidades de hasta 500 mpcd diarios. Sin embargo, esto no nunca sucedió.

“En efecto, la mayor parte de las reservas de Venezuela se encuentran en el oriente del país y, al parecer, todavía no hay infraestructura para traerlas al occidente, frontera con Colombia”, concluyó Uribe.

Esta es la carta difundida por el expresidente Álvaro Uribe: