Por: El Colombiano

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Este artículo fue curado por Santiago Avila   Ago 17, 2023 - 3:18 pm
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El uso de los recursos públicos en Medellín está de nuevo bajo la lupa luego de que salieran a flote documentos que detallan cómo el despacho del alcalde Daniel Quintero viene gastándose su “caja menor”.

Pese a que dichos recursos, clasificados como Fondos Fijos Reembolsables, en teoría deberían destinarse únicamente para la “cancelación de gastos de funcionamiento imprevistos, urgentes y necesarios”— con miras a garantizar el cumplimiento de las funciones públicas, según establece el Decreto 1645 de 2006— en el mismo reposan gastos en todo tipo de cigarrerías, panaderías, supermercados, verdulerías, establecimientos de comida rápida y hasta restaurantes de lujo.

En contexto: ¿La Alcaldía de Medellín paga mercado, flores y hasta buñuelos con la ‘caja menor’?

Los montos, que comprenden desde pequeñas compras hasta otras que alcanzan los siete dígitos, aparecen asignados a todo un universo de locales comerciales.

En el renglón de la comida rápida, por ejemplo, aparecen múltiples compras en la cadena de restaurantes Los Perritos, en donde en una sola factura la Alcaldía llegó a gastarse entre $ 145.000 y $ 256.000.

También aparecen compras en establecimientos dedicados a la venta de empanadas, buñuelos y pastelería, como Mi Buñuelo, Cocorollo y La Miguería, registrándose transacciones de $ 43.000, $ 105.300 y $ 70.000 respectivamente.

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En los soportes, también pueden verse como con la caja menor se costearon compras en Kokoriko, Fisby, Crepes & Waffles, la Heladería Soft Touch, Il Forno, Asados La 80, Donuts Antioquia, entre muchos otros.

Y aunque en estos establecimientos los montos no fueron muy grandes, también aparecen costosas transacciones en restaurantes de lujo o ubicados en sectores exclusivos, como es el caso del restaurante de alta cocina Okus, ubicado en El Poblado, en donde los contribuyentes costearon una cena de $ 717.035 para los funcionarios del piso 12 de La Alpujarra.

En este rubro, las arcas públicas también costearon una comida en Osaka Cocina Nikkei, por $ 1.719.414, múltiples compras en San Carbón, entre otros restaurantes.

La lista de establecimientos también incluyen compras menudas y grandes en todo tipo de supermercados, como D1, Éxito, Carulla, Cencosud, Pricesmart, así como licoreras y cigarrerías.

Del 9 de mayo, por ejemplo, también aparecen dos facturas por más de $ 3’100.000 en el establecimiento Hijo Negado, ubicado en El Poblado, cuya razón social figura como “expendio de bebidas alcohólicas para el consumo dentro del establecimiento”.

Cabe recordar que todas estas compras terminaron saliendo a flote luego de que a la Contraloría de Medellín llegaran quejas internas de la Alcaldía sobre el uso de dichos Fondos Fijos Reembolsables, generando que ese ente de control requiriera a la Secretaría de Hacienda para dar explicaciones por el tema.

La respuesta de esa dependencia, que fue filtrada en las redes sociales, consistió en un archivo de imagen en formato PDF, en el que se informaron de los gastos, sin especificar los ítems comprados con los recursos públicos.

Cabe recordar que estos fondos, que se asignan al despacho del alcalde, tiene como encargado al secretario privado de la Alcaldía, Juan David Duque.

Durante el último cuatrienio, el gobierno también se encargó de subir el tope de aprovisionamiento de dicho fondo, que estaba en $ 2 millones al comienzo del mandato, a 20 salarios mínimos.

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