Este domingo, un video del presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, se compartió profusamente en diferentes rede sociales. En la corta secuencia, se ve al mandatario reclamando que no lo dejaron entrar a un estadio de fútbol para ver un partido por no estar vacunado contra el coronavirus.

A pesar de que es el presidente de dicha nación y se supondría tiene muchas influencias y poder, Bolsonaro por más que habló, no pudo entrar al estadio Urbano Caldeira, en Sao Paulo, para ver el juego entre Gremio y Santos.

“Me dijeron que tengo que estar vacunado. ¿Por qué, si yo tengo más anticuerpos que con la vacuna?”, se les escucha decir a Jair Bolsonaro en el video que compartió el portal Metrópoles en su cuenta de Twitter.

El presidente de Brasil hizo el reclamo ante la cámara sin uso del tapabocas, hecho por el que muchas personas aplaudieron la decisión de que no lo dejaran entrar al estadio.

Jair Bolsonaro, que ha dicho públicamente que será el último brasileño en vacunarse contra el COVID-19 y que desde que empezó la pandemia la ha subestimado, tuvo que comer en la calle en Nueva York, luego de que el restaurante al que quería entrar le pidiera su carné de vacunación.

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El pasado viernes, Brasil superó el umbral de los 600.000 muertos por la pandemia del COVID-19, que según especialistas sigue sin estar controlada pese a la caída del número de fallecidos diarios gracias al avance de la vacunación.

Con más de 601.000 decesos desde el 12 de marzo de 2020, este país de 213 millones de habitantes es el segundo con más víctimas mortales después de Estados Unidos. 

El país norteamericano, con una población 35 % superior a la de Brasil, acaba de superar los 700.000 muertos.

Los últimos datos del Ministerio de Salud brasileño, considerados subestimados por los expertos, reportan un total de 21,5 millones de contagios desde el inicio de la pandemia.

“La situación mejoró, pero debemos tener cautela”, dijo Margareth Dalcolmo, neumóloga integrante del prestigioso instituto de investigación Fiocruz.

Solo se podrá considerar controlada la pandemia cuando “se tenga el 80 % de la población inmunizada”, lo que aún está lejos de ser el caso, evaluó.

Por ahora, el 71,4 % de los brasileños ha recibido al menos una dosis de vacuna, pero solo 45,9 % ha completado el ciclo de inmunización.

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