Las autoridades de esa región argumentaron que tanto la señora Sun, como fue identificada la protagonista de la historia, como otras personas fueron consideradas un riesgo para la salud pública por haber estado expuestas al coronavirus, publica el diario Mirror.
La idea de los policías era llevar a la mujer a una zona de cuarentena por 14 días, pero ella se negó y les cerró la puerta en la cara. Cuando derribaron la puerta, Sun estaba sosteniendo un cuchillo de carnicero y los amenazó con agredirlos si la tocaban, detalla el mismo medio.
“Solo la llevaremos a un hospital para una prueba”, le dijo uno de los uniformados, a lo que ella respondió que no necesitaba ningún examen, por lo que el policía le replicó que debía hacerlo porque era uno orden del gobierno: “Te llevaremos a la fuerza”.
Cuando se acercaron, la mujer se abalanzó y empezó a lanzar cuchillazos, hasta que rompió uno de los escudos. Por ello, la sometieron luego de lanzarle gas pimienta en la cara, indica Mirror.
Además de ser enviada a las instalaciones de cuarentena, la mujer será juzgada por cargos de obstrucción a la justicia y violencia contra las autoridades, finaliza ese rotativo.
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