Los caballos, que habían sido confiscados en noviembre de la residencia de Andrade en Wellington, al oeste de West Palm Beach (norte de Miami), se vendieron el martes por un total de 2’086.500 dólares.

Si bien los premiados animales estaban valorados en nueve millones de dólares, “estamos contentos con el resultado final″, dijo Kevin Tyrrell, un agente especial del Departamento de Seguridad Interna que participó en la investigación, al diario The Palm Beach Post.

Andrade, de 54 años, se entregó el lunes a las autoridades estadounidenses y ahora cumple 10 años de prisión en Pensilvania, luego de haber sido hallado culpable de participar en una red de lavado de 1.200 millones de dólares saqueados de la estatal de petróleos venezolana PDVSA.

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Andrade colaboró con la fiscalía estadounidense para desbaratar la red de lavado de dinero, en un sonado caso en el que está implicado el dueño del canal venezolano Globovisión, Raúl Gorrín.