El hundimiento del Mosvka, buque insignia de la flota rusa en el mar Negro, supone un duro revés para el gobierno de Vladimir Putin, que asegura que su pérdida se debió a un incendio accidental que provocó la detonación de sus municiones, mientras Ucrania sostiene que fue alcanzado por dos misiles de crucero.

Por estos hechos, la presentadora Olga Skabeyeva del canal estatal del Kremlin aseguró que la guerra ya tiene alcance global. Según explicó, la escalada entre ambas partes “podría llamarse con seguridad la tercera guerra mundial”.

(Lea también: Se hundió buque insignia de Rusia en mar Negro, luego de ataque reivindicado por Ucrania)

La postura de la periodista va en línea con otras publicaciones de la prensa que propaga las informaciones del Kremlin y que afirma que sus tropas tomaron prisionero a personal militar de países de la OTAN que estaba en el este de Ucrania colaborando con la defensa del territorio.

Expertos que acompañaban a Skabeyeva calificaron al hecho como “una causa absoluta de guerra” y dijeron que “no hay nada en qué pensar, tiene que haber una respuesta”, sugiriendo incluso la necesidad de un ataque nuclear, según reprodujo The Daily Mail.

La derrota simbólica de perder el buque insignia de su flota también tuvo una reacción oficial de Rusia. El Ministerio de Defensa prometió aumentar los ataques con misiles sobre Kiev en respuesta a las supuestas “incursiones militares” ucranianas en suelo ruso.

Lee También

En cualquier caso, el hundimiento del Moskvá ha privado a Rusia de su buque con mayor capacidad de fuego que tenía emplazado en el mar Negro, y constituye su mayor pérdida material en lo que va de su campaña militar en Ucrania, ya que su valor se estimaba en 750 millones de dólares.

El armamento del buque incluía 16 misiles antibuques Vulkán y 64 misiles antiaéreo antiaéreos S-300F en ocho lanzaderas, además de artillería, torpedos y cargas de profundidad. Además, estaba dotado de un helicóptero Ka-27.

El crucero portamisiles participó en la captura de la pequeña isla ucraniana Zmiiniy (de las serpientes) el 24 de febrero pasado, el día en que Rusia lanzó su llamada “operación militar especial” en Ucrania.

Además de brindarle una victoria propagandística a Ucrania, el hundimiento de Moskva también tiene implicaciones prácticas para Rusia. Lo anterior, porque tenía la tarea de coordinar los movimientos de otros barcos en el mar Negro, lo que puede causar más confusión entre la estructura de mando rusa.