Debido a que lo trasladaron de manera sorpresiva a la isla de Sal, donde fue capturado el pasado 12 de junio, Correa Ortega envió una carta a las autoridades de Cabo Verde, en la que exige ver al empresario colombiano lo más pronto posible, indicó Inforpress.
La agencia de noticias, igualmente, señaló que el embajador venezolano quiere verificar de primera mano el estado de salud actual de Saab, ya que en su primera estancia en esa zona del país africano sufrió de “abuso físico”.
“Hemos solicitado sin éxito a las autoridades de Cabo Verde que autoricen el transporte diplomático para constatar el estado del enviado especial. No se ha explicado el retraso en la obtención de la autorización”, agregó el embajador en declaraciones emitidas por este mismo medio.
Correa Ortega también enfatizó en la carta que nadie cercano al empresario barranquillero recibió la notificación del traslado y que su abogado defensor, José Manuel Pinto Monteiro, no lo ha podido ver desde hace más de 15 días, concluyóel informativo.
El diario El Tiempo, por su parte, aseguró que el barranquillero solicitó en los últimos días ser valorado por un médico y un psiquiatra, para dejar constancia que se encuentra en “óptimas condiciones” mentales.
“Él quiere demostrar que no va a intentar suicidarse. Teme que lo asesinen y que parezca que se quitó la vida”, manifestó un conocido del empresario colombiano en el rotativo.
Con respecto a su extradición a Estados Unidos, la Procuraduría General de Cabo Verde tiene un plazo de 65 días, que cuentan a partir del 12 de junio, para responder a la petición del país norteamericano.
Álex Saab, que fue arrestado en el Aeropuerto Internacional Amilcar Cabral, es acusado de lavado de activos y tráfico de estupefacientes, delitos que habría cometido en EE. UU. en complicidad con el régimen de Nicolás Maduro.
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