La Reina Isabel II tiene muchas cosas que no todos conocen, entre esas, algunos hábitos alimenticios que cuenta su ex chef.
La Reina Isabel II, de 96 años, es la primera monarca en celebrar el Jubileo de Platino que marca 70 años en el trono.
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Durante esta celebración se reunió la familia real británica y mucho se habló del reencuentro del príncipe Harry con su abuela.
También se conoció que la Reina Isabel II por fin conoció a su bisnieta Lilibet tras dos años de que Harry y Meghan decidieran apartarse de la realeza.
Existen muchos datos que no se conocen sobre la monarca pero que algunos de sus ex empleados han dado a conocer.
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Uno de esos es Darren McGrady, un ex chef de la Reina Isabel II que estuvo trabajando en el Palacio de Buckingham durante 15 años.
Él compartió algunos detalles de cómo fue trabajar no solo con la reina sino con la princesa Diana y qué preparaba para ellas.
¿Quieres conocer algunos datos curiosos?
Aquí te contamos.
Reina Isabel II: 6 datos curiosos de la dieta de la monarca, según un ex chef real
Darren McGrady empezó trabajando para la Reina Isabel II en el Castillo de Windsor y luego estuvo acompañando a Diana de Gales.
Fue en el año 1982 cuando el chef llegó a trabajar para la familia real británica. En 1993 fue transferido al personal de la princesa Diana y en 1997 se retiró.
En su libro de cocina, “Eating Royally: Recipes and Remembrances from a Palace Kitchen”, Darren McGrady cuenta anécdotas sobre los hábitos alimenticios de la monarca.
Estos son algunos detalles que reveló el chef:
1. Scones
La Reina Isabel II pedía scones o panecillos siempre con su té diario pero nunca se los comía.
Según el chef, “se servían religiosamente todos los días, alternando entre los de frutas o los simples. Aunque la reina insistió en que fueran parte de su té, sospecho que en realidad no le gustaban. Lo digo porque nunca, nunca los comió”.
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Darren McGrady asegura que ella los desmenuzaba y se los dabas a los corgis, que eran sus perros.
2. El corte de los sándwiches
Uno de los detalles que revela el chef es que a los integrantes de la cocina de la Reina Isabel II no se les permitía cortar los sándwiches en rectángulos o cuadrados.
Esto según cuenta en su libro porque la realeza consideraba que “se parecía demasiado a un ataúd y significaba que le deseabas el mal a la reina. Tuve cuidado de nunca cometer ese error”.
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3. Un menú diferente
Una de las exigencias que tiene la Reina Isabel II es que el menú de sus comidas cambie diariamente.
En su libro, el chef Darren McGrady aseguró que el jefe de cocina tenía que hacer una “lista de sugerencias de menú”
“Cada día escribía sus sugerencias en un libro encuadernado en cuero rojo con ‘Menu Royal’ grabado en oro en la cubierta”.
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4. El gusto por el chocolate
La Reina Isabel II tiene un gran gusto por el chocolate pero cada vez que era Cuaresma renunciaba a comerlo.
Según cuenta el chef, “la reina renuncia al chocolate durante la Cuaresma, por lo que sus chocolates Bendicks Bittermints y Charbonnel et Walker favoritos están desterrados”.
Cuando esta terminaba, los cocineros se encargaban de preparar todo tipo de golosinas con chocolate para compensar los días que la Reina Isabel II no podía comerlos.
5. Comer frutas por temporadas
Para la monarca su temporada favorita para consumir frutas era en enero.
“La Reina era muy exigente con el consumo de frutas de temporada. Podíamos servir fresas casi todos los días durante el verano, pero ay de cualquier chef que las pusiera en el menú en enero”, explica el chef.
6. La hora del almuerzo
El chef Darren McGrady sabía perfectamente la hora en que le gustaba a la Reina Isabel II almorzar.
“El comedor estaba justo al lado de la cocina, y sabíamos cuándo vendría la Reina para almorzar porque la puerta siempre estaba abierta y los perros serían llevados a la cocina”.
Esto sucedía en Wood Farm se encuentra en Queen’s Sandringham Estate, una residencia privada, en Norfolk.
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