Ratzinger, cuyo estado de salud se había deteriorado en gran medida durante las últimas semanas, falleció este 31 de diciembre a la edad de 95 años. Fue apenas el sexto papa en la historia de la Iglesia católica que renunció a su pontificado, pues los papas suelen permanecer en el cargo hasta su muerte.

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El 28 de febrero de 2013, Benedicto XVI protagonizó un suceso que no había ocurrido en casi 600 años. Al renunciar al papado, Ratzinger se convirtió en papa emérito, siendo el primero desde que lo hiciera Gregorio XII en 1415.

El deterioro de la salud del papa emérito Benedicto XVI

La salud de Benedicto XVI se venía deteriorando lentamente y hasta el Vaticano había emitido un comunicado oficial en el que pedía a todos orar por el papa emérito.

“En cuanto a las condiciones de salud del papa emérito, por quien el papa Francisco pidió una oración al final de la audiencia general de esta mañana, puedo confirmar que en las últimas horas se ha producido un agravamiento por el avance de la edad”, dijo el pasado 28 de diciembre el director de la oficina de prensa del Vaticano, Matteo Bruni.

Horas antes del comunicado, el papa Francisco había elevado una plegaria por el estado de salud de su predecesor. El sumo pontífice aprovechó la audiencia transmitida a nivel mundial para hablar de la salud de Ratzinger.

“Pido una oración especial para el papa Benedicto XVI, que en el silencio está sosteniendo la iglesia, y recordar que está muy enfermo y pidiendo al Señor que lo consuele y lo apoye en este testimonio de amor a la Iglesia hasta el final”, había manifestado el papa.

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La última fotografía del papa emérito la publicó el pasado primero de diciembre la Fundación Joseph Ratzinger, cuando él recibió en su residencia a los dos galardonados con el premio que lleva su nombre, el biblista francés Michel Fédou y el jurista estadounidense Joseph Weiler.

Como en las últimas imágenes difundidas, Benedicto XVI aparecía sentado en el sofá junto a su fiel secretario y muy delgado, pero atento a la conversación. Todos los que lo visitaron en los últimos meses aseguraban que Ratzinger hablaba con un hilo de voz, que no caminaba y se le veía muy frágil, pero que estaba completamente lúcido.

¿Por qué Benedicto XVI renunció a ser papa?

En febrero de 2013, Ratzinger informó que dejaba el papado por “falta de fuerzas” y un agravamiento en su condición de salud.

“Ahora, confiamos la Iglesia al cuidado de su Sumo Pastor, Nuestro Señor Jesucristo, y suplicamos a María, su Santa Madre, que asista con su materna bondad a los Padres Cardenales al elegir el nuevo Sumo Pontífice. Por lo que a mí respecta, también en el futuro, quisiera servir de todo corazón a la Santa Iglesia de Dios con una vida dedicada a la plegaria”, dijo en una carta abierta antes de que Francisco fuera elegido como nuevo papa, en marzo de 2013.

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¿Dónde vivía Benedicto XVI luego de renunciar como papa?

Ratzinger dejó el Palacio Apóstólico del Vaticano en febrero de 2013, pero no se fue muy lejos. El papa emérito continuó viviendo en la Ciudad del Vaticano hasta el día de su muerte.

Desde que dejó el papado, en 2013, Benedicto XVI vivió en Mater Ecclesiae, un monasterio ubicado en la Colina Vaticana (emplazado dentro de los icónicos jardines del Vaticano).