La manifestación, en la que se escucharon gritos xenófobos y se vieron cientos de banderas chilenas, ocurrió luego de que el pasado viernes la Policía Nacional de Chile desalojara la plaza donde acampaban varias familias de venezolanos.

En medio de la masiva marcha algunos manifestantes se salieron de control y quemaron carpas, ropa y carritos de bebé, entre otros objetos, los cuales pertenecían a los migrantes que se encontraban en ese lugar.

“Lo peor es que este gobierno ha dejado que esto crezca y los que han llegado no son refugiados políticos ni inmigrantes que aportan con su trabajo, aquí han llegado muchos delincuentes”, indicó Veliz Rifo, un agricultor de 48 años, que asistió a la movilización.

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El Gobierno de Venezuela, por su parte, repudió las agresiones contra los migrantes que se produjeron durante los últimos días en Iquique y activó el plan ‘Vuelta a la Patria’, que busca facilitar el retorno de miles de venezolanos.

“Repudiamos la xenofobia y las agresiones contra los migrantes venezolanos y les exigimos a las autoridades de Chile respeto a la integridad física y psicológica de nuestros connacionales”, afirmó Delcy Rodríguez, vicepresidenta ejecutiva del vecino país, en Twitter.

La Policía de Investigaciones de Chile (PDI) realizó este lunes las primeras diligencias en el marco de la causa abierta por la quema de pertenencias de los migrantes que estaban acampando.