De acuerdo con la policía británica, Glushkov murió por una “compresión en el cuello”. Según Independent, las autoridades todavía no encuentran vínculo entre este fallecimiento y el intento de asesinato del exespía ruso Sergéi Skripal, asunto que deterioró las relaciones entre Reino Unido y Rusia.

Scotland Yard, la Policía Metropolitana de Londres, en un principio trató la muerte de Glushkov como “inexplicable”, pero luego de los exámenes ‘post mortem’ se llegó a la conclusión de que murió asfixiado.

Al momento de su deceso, Glushkov, de 68 años, estaba preparando su defensa ante la corte comercial de Londres, donde había sido acusado por las autoridades rusas de fraude.

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La decisión de iniciar una investigación criminal por la muerte del disidente sin duda aumentará la atención sobre la seguridad de los rusos que residen en el Reino Unido. Además, puede llevar a que las tensiones entre el gobierno británico y el ruso aumenten mucho más, agrega The Guardian.

Glushkov fue muy amigo del empresario ruso Boris Berezovsky, que también tuvo que exiliarse en Reino Unido por sus diferencias con el gobierno de Vladimir Putin, y que fue hallado ahorcado en Londres en marzo de 2013.