“Vamos a hablar del tema (del envenenamiento) en el Consejo de la Unión Europea. Ahora no es cuestión de un boicot de la Copa del Mundo, sino de dilucidar (el crimen)”, declaró Merkel en conferencia de prensa en Berlín.

Esta declaración llega después de que el gobierno británico anunciara que ningún miembro de la monarquía británica ni ningún ministro viajarán a Rusia durante el Mundial, del 14 de junio al 15 de julio, como protesta por el envenenamiento de Serguéi Skripal y su hija Yulia.

Ambos fueron hospitalizados en estado grave tras ser envenenados el 4 de marzo por una sustancia tóxica en Salisbury, una ciudad del sur de Inglaterra, y el gobierno de Londres ha acusado a Moscú de estar implicado en el caso, provocando una confrontación Este-Oeste sin precedentes desde la Guerra Fría.

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El miércoles, la primera ministra del Reino Unido, Theresa May, anunció la expulsión de 23 diplomáticos rusos y la suspensión de los contactos bilaterales con Rusia, una decisión que Moscú considera “absolutamente irresponsable”.

Rusia advirtió este viernes que está dispuesta a expulsar “de un momento a otro” a diplomáticos británicos de su territorio en respuesta a las sanciones de Londres por el envenenamiento de un exespía ruso.

“Solo espero que Rusia va a participar también en el esclarecimiento (del crimen) y ayer dijimos claramente que los indicios apuntan con toda probabilidad a Rusia”, añadió Merkel.

Moscú niega haber participado en el suceso, como también la existencia de un programa secreto en la época de la Unión Soviética para poner a punto armas químicas.

Con AFP