“Prometo pagar un millón de dólares a cualquier oficial de policía que, cumpliendo con su deber constitucional, arreste a Vladimir Putin como un criminal de guerra según el derecho ruso e internacional, escribió el empresario en su perfil de Facebook hace unos días, en una publicación con una foto al estilo del Lejano Oeste y las palabras “se busca vivo o muerto.

La publicación fue eliminada por la red social, como escribe el propio Konanykhin, exbanquero y antiguo miembro del círculo político del expresidente Boris Yeltsin, en un post más reciente, donde vuelve a repetir el texto pero esta vez sin la foto, aclara.

“Como ciudadano de etnia rusa (escribió en su publicación) veo como mi deber moral facilitar la desnazificación de Rusia. Continuaré ayudando a Ucrania en sus heroicos esfuerzos para resistir el asalto de la horda de Putin, afirma en su oferta de recompensa.

“Putin no es el presidente ruso, ya que llegó al poder como resultado de una operación especial de volar edificios de apartamentos en Rusia, luego violó la Constitución al eliminar las elecciones libres y asesinar a sus oponentes, escribe también.

Konanykhin emigró a Estados Unidos a mediados de los años 90.

Lee También

Rusia y Ucrania acuerdan cesa al fuego temporal, pero la guerra no acaba

El asesor presidencial ucraniano Myjailo Podoliak informó que en las negociaciones de este jueves se acordó detener los ataques por motivos humanitarios.

“Las partes han llegado a un entendimiento sobre la creación conjunta de corredores humanitarios con un alto el fuego temporal”, señaló en su canal de Telegram.

Podoliak añadió que la delegación negociadora ucraniana “no obtuvo los resultados que esperaba y continuará el diálogo en una tercera ronda de conversaciones.

El jefe de la delegación rusa, Vladímir Medinski, dijo que, “en general, hubo un entendimiento en la mesa de las negociaciones, pero en ciertas cuestiones “la parte ucraniana tomó un tiempo para reflexiones y consultas en Kiev”.

La segunda ronda de negociaciones entre Rusia y Ucrania sobre la invasión rusa tuvo lugar en Belovezhskaya Pushcha, en la región bielorrusa de Brest, cerca de la frontera polaca.