Dos días después de que estallaran las protestas masivas en Cuba se ha confirmado el primer muerto. Sin embargo, el gobierno insiste en culpar a Estados Unidos, mientras que el internet en toda la isla sigue cortado.
“No hubo en Cuba el pasado 11 de julio un estallido social. No lo hubo por la voluntad de nuestro pueblo y el apoyo a la revolución”, afirmó el canciller Bruno Rodríguez en una conferencia de prensa.
El hombre, de 36 años, falleció cuando participaba en una movilización en el humilde barrio de La Güinera, en la periferia de La Habana, donde hubo enfrentamientos entre los manifestantes y la fuerza pública.
De acuerdo con la organización Human Rights Watch (HRW), el número de personas arrestadas en medio de las manifestaciones asciende a 150, incluida la reconocida “influencer” cubana Dina Stars.
La creadora de contenidos fue detenida en su propia casa por la policía cuando estaba hablando en vivo en un programa español debido a que publicó un video de su participación en una protesta en La Habana.
Las fuertes movilizaciones en Cuba, ampliamente difundidas en las redes sociales, comenzaron de forma espontánea el pasado fin de semana, un hecho poco habitual en un país dirigido por el Partido Comunista (PCC), donde las únicas concentraciones autorizadas suelen ser las del propio gobierno.
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