Carlos Mattos quedó detenido este miércoles en Madrid a la espera de su extradición a Bogotá, informaron fuentes judiciales y ya está en el aeropuerto, a punto de despegar hacia Colombia.

Mattos acudió este miércoles a una vista en la Audiencia Nacional, una alta jurisdicción en la capital española a cargo de las extradiciones, por un segundo pedido de extradición cursado por Colombia, luego de que una primera petición ya hubiera sido aprobada en 2020, dijo a la agencia AFP un portavoz de ese tribunal.

“Cuando terminó esta vista, se le ha ordenado detener para que se ejecute la entrega de la primera solicitud de extradición”, explicó el portavoz.

La entrega a las autoridades colombianas tomará “lo que tarden las policías de ambos países en coordinarse y llevárselo para allá”, dijo la fuente, aclarando que la segunda solicitud de extradición “no paraliza la primera”.

De todas maneras, un abogado de Mattos, Iván Cancino, afirmó a Caracol Radio que “la extradición no se hará efectiva de manera inmediata ni rápida”, ya que la defensa del empresario interpuso “recursos” ante la justicia española y “todavía queda muchísima batalla jurídica para dar”.

(Vea también: Justicia española autoriza extradición a Colombia de empresario Carlos Mattos)

No obstante lo dicho por Cancino, Blu Radio informó que los recursos jurídicos no habían tenido efecto y que Mattos ya estaba en al avión, a punto de partir hacia Colombia.

La historia de Carlos Mattos en el caso Hyundai

Mattos se refugió en abril de 2018 en España alegando un delicado estado de salud. La fiscalía colombiana pidió su extradición en octubre del mismo año por presuntamente ofrecer pagos a funcionarios judiciales para conseguir que un multimillonario pleito fuera asignado a un juez a quien también habría sobornado.

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El caso corresponde a una demanda de Hyundai Colombia (de la cual Mattos era el mayor accionista) contra la coreana Hyundai Motor Company para impedir que la multinacional comercializara automóviles y repuestos con empresas distintas a la suya.

Según la documentación judicial tramitada por la fiscalía colombiana, el soborno se elevaría a 200 millones de pesos (unos 54.000 dólares).

Iván Cancino señaló que su defendido va a ser ingresado en la cárcel de Soto del Real, en la región de Madrid, donde será tratado en la enfermería por sus afecciones de salud, que no detalló.