La investigación que se está llevando a cabo por el ataque a la vicepresidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, se vio afectada este domingo 4 de septiembre al momento de examinar el teléfono del sospechoso.

Y es que el móvil que portaba el brasileño Fernando Andrés Sabag Montiel la noche en la que atentó contra la vicepresidenta fue formateado “por error” en uno de los intentos de la policía por encontrar información, según informó La Nación.

Debido a esto, podría perderse una prueba clave contra el acusado, quien se ha negado a declarar, expuso el diario. Además, explican que los peritos informáticos encargados de desbloquear el celular fueron los que hicieron que este se reiniciara y volviera a “estado de fábrica”.

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Es decir, la información y el contenido del dispositivo podrían eliminarse y por ende, no servirían como evidencia dentro del juicio.

“Es gravísima la responsabilidad de la jueza, el fiscal y los que manipularon el celular del imputado”, escribió en sus redes sociales, el abogado de la vicepresidenta, Gregorio Dalbón.

Además, añadió: “De confirmarse la información de algunos periodistas, iniciaremos otra causa contra todos los responsables de tremendo ‘error’ judicial, y/o posible encubrimiento agravado”.

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La Nación explica que Dalbón se encontraba analizando la posibilidad de calificar el atentado como un intento de feminicidio, así como la de ampliar la investigación para buscar cómplices. En ese objetivo, el análisis del dispositivo electrónico era fundamental.

“Estamos analizando la calificación por lo ocurrido con Cristina Fernández. Debiera ser intento de femicidio en grado de tentativa agravado (alevosía y arma de fuego). Además de portación ilegal de armas. No hay que minimizar los tipos penales con estos asesinos”, escribió el defensor el pasado sábado en sus redes.

Por su parte, el principal detenido se negó a declarar y facilitar a los investigadores la contraseña de su teléfono móvil, el cual cargaba el pasado jueves, cuando apuntó con un arma de fuego e intentó dispararle en el rostro a Fernández. Sin embargo, el disparo no salió y fue reducido rápidamente.