Además del estadounidense Cousins, su compañero de equipo DeAndre Jourdan también mide 2,11 metros. La pequeñita Biles, por su parte, es la más bajita de los más de 10.000 atletas que compiten en Río 2016, con 1,44 metros, lo cual se queda 6 centímetros corto del metro y medio, informa el San Diego Union Tribune.

Las mujeres no se quedan atrás en estatura, a juzgar por varias de las participantes de una misma disciplina, el volleyball, como señala el portal Worldofvolley.com.

También le puede interesar:

La más alta entre las jugadoras de volleyball es la rusa Daria Malygina, con 2,02 metros; le sigue la china Xinyue Yuan, con 2,01 metros; y luego vienen la brasileña Thaisa Menezes, la rusa Irina Zaryazhko (1,96 m) y la serbia Jovana Brakočević Canzian, todas con 1,96 m.

Un centímetro ‘más abajo’ están las chinas Ting Zhu y Yunli Xu, con 1,95 m de estatura, al igual que las italianas Cristina Chirichella y Anna Danesi, y la argentina Lucia Daniela Fresco.

Después del baloncesto, el volley es el que más atletas altos reúne. Ejemplo de ello son los deportistas Mateusz Bieniek, de Polinia, con 2,10 m de estatura; Alexander Volkov, de Rusia, con, 2,10 m; Lucas Saatkamp, de Brasil, con 2,09 m; Kevin Le Roux, de Francia, con 2,09 m; el italiano Matteo Piano, el canadiense Gavin Schmitt y los rusos Egor Kliuka y Artem Volvich, con 2.08 m; y el brasileño Evandro Guerra y el canadiense Daniel Vandoorn, con 2.07 m.

Otra de las más pequeñas es la compañera de Simone Biles, Ragan Smith, que mide 1,46 metros. Otros altos son los nadadores estadounidenses Nathan Adrian, con 1,98 m., y el multimedallista Michael Phelps, que mide 1,93 m.

Lo anterior permite concluir que un deportista de la talla de Michael Phelps no podría hacer las piruetas que logra la pequeñita Simone, mientras que esta gimnasta necesitaría una escalera para encestar la bola.

Temas relacionados:

LO ÚLTIMO