“Antes de tirármele la carrera o hablar de ella, preferiría conversar con ella personalmente y preguntarle el por qué”, aseguró Yina en una entrevista con La Red en la que estuvo a punto a llorar cuando contó su experiencia con la peligrosa sustancia. Poco después agregó:
“No soy yo la encargada de tirármele la carrera a alguien porque no sé qué pasó por la cabeza de ella en ese momento. No soy juez y yo creo que eso solamente le corresponde a Dios”.
Durante la entrevista, Yina dijo que quiso hacer público su caso para que otras “chicas no caigan en lo mismo”. Agregó que por fortuna ella tiene los recursos para reconstruirse el músculo y ponerse unas buenas prótesis en el futuro. “Pero, ¿las que no tienen plata?”, se preguntó la exprotagonista de novela.
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Yina también expresó su preocupación por algo que le contó el cirujano que le retiró los biopolímeros de su cola: de todas las mujeres que se mandan a agrandar la cola, el 70 % se ha inyectado esa sustancia y lo peor es que ellas mismas lo saben. El médico le dijo que lo mejor que pueden hacer es retirársela y acudir a un buen doctor “porque el biopolímero, tarde o temprano, se pronuncia“.
Cabe mencionar que si bien Yina está afectada por lo que le pasó, también está triste porque por ahora no puede mostrar sus nalgas ni publicar fotos de ellas en Instagram. De hecho, la joven piensa en ponerse prótesis tan pronto se recupere.
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