En el proceso que cursa contra los 2 hijos de Jota Mario Valencia, un hombre de 43 años pide que se le reconozca como hijo del presentador y, por lo tanto, se le amparen sus derechos sobre la herencia del comunicador, explica el medio de comunicación, que presenta 2 copias de fax que prueban que el proceso está en curso en un juzgado de familia de Bogotá.
En dichos documentos, indica la agencia dirigida por el periodista Norbey Quevedo, el demandante -identificado como Alejandro Ávila- dice que fue su mamá quien le contó solo hasta cuando Valencia falleció, en junio del año pasado, que él era hijo del presentador.
Con la confesión que relata Ávila en la demanda, añade el medio, hay una historia de amor entre Jota Mario Valencia y Teresa de Jesús Ávila Fula, una mujer mayor que en 1975, cuando la pareja se conoció, trabajaba en las labores del hogar de una familia alemana en el barrio la Soledad, en el centro Bogotá.
En su relato a la justicia, continúa la API, Ávila manifiesta que su madre le pidió a Valencia formalizar su noviazgo luego de que comenzaron a verse de forma “clandestina” y pese a que el comunicador no la trataba como su novia “por la diferencia social que existía entre los dos”.
“La relación se quebró cuando Teresa le dijo al joven [Jota Mario] que se le había presentado un retraso en la menstruación y que ella estaba asustada porque creía que estaba embarazada, el joven se mostró indiferente ante esta situación y desde ahí dejó de comunicarse con Teresa, la ignoraba, no le contestaba las llamadas telefónicas, en síntesis la abandonó”, menciona Ávila en la narración que reseña el portal de noticias.
Tras conocer el relato de su mamá, agrega la agencia, Alejandro Ávila contrató a un investigador para corroborar esa historia y luego le dio poder al abogado que inició el mencionado proceso judicial, que podría incluir pruebas de ADN a los hijos de Valencia en vista de que el cadáver del periodista no se puede exhumar pues fue cremado.
El proceso, resalta la API, implicaría además el pleito por una millonaria demanda que incluiría una casa lote adquirida en el 2015 por $1.040 millones, un apartamento comprado en el 2003 por $403 millones y acciones en 4 empresas en las que Jota Mario, según la agencia, tenía participación.
Este litigio, concluye el portal de noticias, debe resolverse máximo en un año en condiciones normales, es decir que debería emitirse un fallo antes de agosto próximo. Pero, precisa el medio, el trámite se ha prolongado un poco más por los efectos de la pandemia de la COVID-19 en este tipo de casos.
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