Pulzo entrevistó a varios vendedores ambulantes de Bogotá para conocer su posición sobre las repercusiones que han traído para ellos los primeros días con una gran parte de la ciudad trabajando desde la casa y evitando al máximo la movilidad por la misma.
Todos aseguran que sus ventas se han disminuido hasta en un 60 % y que el lunes y el martes parecieron días propios de un fin de semana porque la gente que trabaja en oficinas cerca de ellos ya no está.
Contrario a lo que las autoridades sanitarias y expertos indican, que el coronavirus es un tema para afrontar con la mayor seriedad del caso, los comerciantes informales manifiestan que creen que el gobierno está exagerando con las consecuencias que podría traer para la ciudadanía el virus COVID-19.
Una de las vendedoras entrevistadas llegó a criticar el hecho de que las medidas preventivas se concentraran en los ciudadanos y no en la llegada de viajeros en el Aeropuerto El Dorado.
Finalmente, todos estuvieron de acuerdo en que un estado de cuarentena en la ciudad sería fatal para ellos. “La gente no tiene la plata disponible para estar en cuarentena”, “¿De qué vamos a vivir?”, “¿Quién lo mantiene a uno?” y “Sería lo peor que podría pasar” fueron algunas de las respuestas que entregaron ellos al respecto.
Este es el video con sus impresiones:
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