Este viernes, Oma y Presto, dos de las cadenas más reconocidas de café y hamburguesas en Colombia, solicitaron acogerse a un proceso de reorganización empresarial en el marco de la Ley 1116 de 2006. Así lo informaron las sociedades Restcafe y Frayco, propietarias de las respectivas marcas, mediante un comunicado.

¿En qué consiste la reorganización empresarial? Es una figura jurídica que permite a las empresas que atraviesan dificultades financieras, o que están en riesgo de cesar pagos, normalizar sus relaciones comerciales y crediticias mediante una reestructuración operativa, administrativa, de activos o de pasivos.

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Este proceso se realiza con la intervención de la Superintendencia de Sociedades, que designa un promotor encargado de elaborar un acuerdo entre la empresa y sus acreedores, con el fin de garantizar la viabilidad del negocio y el cumplimiento de las obligaciones.

La reorganización empresarial busca proteger la continuidad del negocio y el empleo, así como los derechos e intereses de los proveedores, acreedores y arrendadores. Además, busca preservar la estabilidad del mercado y el sistema financiero.

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¿Por qué Oma y Presto solicitaron entrar a reorganización empresarial?

Según el comunicado de Restcafe y Frayco, las empresas tomaron esta decisión debido a varios factores que afectaron su desempeño económico y operativo en los últimos años. Entre ellos se destacan:

  • La inflación, el costo de los insumos, el aumento de las tasas de interés y el impacto en el consumo.
  • La pandemia del COVID-19 y las medidas restrictivas que afectaron la movilidad y la demanda de sus productos.
  • La situación social y política del país que generó bloqueos, vandalismo y pérdidas materiales en algunos puntos de venta.

Las empresas afirmaron que con esta medida buscan “viabilizar las dos marcas hacia un futuro más sólido” y “mejorar la experiencia con sus consumidores, ofreciendo un servicio y productos de alta calidad”.

¿Qué implicaciones tiene la reorganización empresarial para Oma y Presto?

Las empresas aseguraron que el proceso de reorganización empresarial no afectará la continuidad de sus operaciones ni la atención a sus clientes. Por el contrario, les permitirá fortalecer su oferta comercial y su presencia en el mercado nacional.

Asimismo, indicaron que los colaboradores de ambas empresas tendrán derechos y garantías frente al proceso y seguirán con el pago de salarios y prestaciones sociales. La normativa establece herramientas que aseguran la continuidad de las operaciones y la empleabilidad.

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Finalmente, expresaron su confianza en el mercado colombiano y su compromiso con el desarrollo del país. “Café Oma y Presto continúan creyendo en el mercado colombiano y su objetivo con esta decisión es mejorar la experiencia con sus consumidores”, concluyeron.

Oma y Presto son dos marcas con más de 40 años de trayectoria en Colombia, que cuentan con más de 400 puntos de venta en todo el territorio nacional. Con el proceso de reorganización empresarial buscan superar las dificultades que han enfrentado y consolidar su posicionamiento como líderes en sus respectivos segmentos.