La Asociación Colombiana de Productores de Cine Independiente (Asocinde) también indicó que de llegarse a aprobar esta ley, la industria cinematográfica nacional perdería incentivos tributarios, lo que generaría que compañías mundiales como Netflix o HBO no tengan motivos para realizar producciones en Colombia, aseguró el periódico El Espectador.

Ana Piñeres, presidenta de Asocinde, le indicó a ese medio de comunicación que, en términos generales, se perderían cerca de 10 años de crecimiento exponencial del sector.

“La Ley de Cine ha generado resultados positivos para el crecimiento de la producción de cine nacional, por lo que en los últimos años el país ha pasado de producir cuatro películas colombianas (en el año 2001) a las 40 que serán estrenadas a lo largo del 2018”, le dijo a El Espectador.

Bajo este panorama, la Ley, que en los últimos años ha generado más de 86.000 millones de pesos por la filmación y producción de películas extranjeras, perdería sus beneficios tributarios y dejaría en vilo a las más grandes productoras de cine en el país, entre ellas: Dynamo, CMO Producciones, Laberinto, 64Afilms, Rhayuela, Diafragma y AG Studios.

“La Ley de Financiamiento sacaría a Netflix del país y a cualquier estudio que quiera rodar en Colombia”, concluyó Piñeres en entrevista con ese medio.

A esta discusión también se suman los artistas musicales y empresarios que, en los últimos días, han puesto oposición a la nueva reforma tributaria ya que los conciertos quedarían exentos de un IVA de 18%.

En diálogo con La República, Ángela Castro, gerente de Ocesa (una de las empresas más grandes del país en la producción de eventos y espectáculos), señaló que la industria tendría que hacer frente a dos nuevos escenarios: “de un lado, las boletas que hoy no están gravadas pasarían a tener un IVA unificado de 18% en 2019 y de 17% en 2021 y, del otro, a las que hoy ya tienen una carga de 10% se les impondría un IVA adicional de 18% por lo que la carga tributaria total ascendería a 28%”.

Por ahora, el Gobierno no ha anunciado ninguna modificación en la columna vertebral de la Ley de Financiamiento. Sin embargo, varios gremios de todos los sectores siguen oponiéndose al proyecto.