Por: CENET

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Este artículo fue curado por Marizol Gómez   Oct 27, 2023 - 3:44 pm
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La entrada en vigor del “Impuesto Saludable”, como parte de la reforma tributaria del Gobierno actual, ha generado preocupación entre los tenderos y consumidores en Colombia.  “Los hogares colombianos, en particular los de estratos populares, tendrán que pagar un sobreprecio en más de 20 productos, lo que generará automáticamente un impacto en el costo de la canasta familiar.

Es necesario destacar que el 95% de las tiendas se localizan en estratos 1, 2 y 3”, aseguró Jaime Alberto Cabal, presidente de Fenalco, durante Góndola 2023, evento que se adelanta en Cartagena.

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Fenalco había alertado anteriormente sobre el efecto adverso que tendría este nuevo impuesto en productos como refrescos, gaseosas y pasabocas, no solo en el bolsillo de los ciudadanos, sino también en toda la cadena de valor.

Según los datos del gremio, el 16% de los ingresos totales de una tienda provienen de las bebidas azucaradas, mientras que el 16.8% proviene de ultraprocesados. “Esto quiere decir que los nuevos impuestos gravarán una tercera parte de los ingresos totales de las tiendas”, agregó el vocero de los comerciantes.

Las estimaciones económicas de Fenaltiendas indican que en el primer año, los impuestos generarán una disminución mínima del 8% en los ingresos totales de una tienda. A medio plazo, en tres años, esta disminución continua podría poner en riesgo hasta el 25% de las tiendas y panaderías del país.

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La categoría de refrescos y bebidas azucaradas es esencial para las ventas de una tienda y actúa como anzuelo para el consumo de otros productos como pasabocas, panadería y alimentos preparados.

Además, los estudios de Fenaltiendas señalan que una tienda estaba a tan solo $48.000 por persona de ser considerada en situación de pobreza según el Dane. Con la inflación acumulada, que disminuye lentamente, la situación puede volverse mucho más crítica para el tendero promedio.

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“Medidas que perjudiquen a las familias de menores ingresos y a las micro y pequeñas empresas truncan la posibilidad de crecimiento de este segmento, tan necesitado de apoyo. Claramente es un grave error en esta coyuntura de alta inflación”, concluyó Cabal Sanclemente.

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