A pesar de que el presidente Gustavo Petro quiso matizar su intención de acabar con las EPS –unas de sus propuestas más polémicas en campaña–, todo se desinfló cuando el mismo mandatario, de la mano de la ministra Carolina Corcho, presentó el texto final de la controvertida reforma a la salud que ahora sumerge en riesgos, incertidumbre y miedo a todo el sistema que quiere modificar.

Y es que si bien en un primer momento Petro decidió echarse para atrás y no acabar con las Entidades Prestadoras de Salud (EPS), en el articulado final que llegó al Congreso para ser debatido esas entidades sí se verían afectadas. Prácticamente destruidas.

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Y no es lo único, pues la reforma a la salud sigue levantando ampolla en todos los sectores políticos. Precisamente, el Centro Democrático denunció este jueves un “festín clientelar” alertando por la creación de entre 6.000 y 31.000 nuevos cargos solo para el fortalecimiento de la Administradora de los Recursos del Sistema General de Seguridad Social en Salud (Adres).

Mientras tanto, el sector salud rechaza los pañitos tibios del gobierno y cuestiona las medidas que tendrían que adoptar si el articulado finalmente queda aprobado. Incluso, en redes sociales se le ha cuestionado a Petro por qué, si defiende a la Nueva EPS, está afiliado a la privada Sanitas. Él no ha respondido.

En ese contexto, EL COLOMBIANO buscó a Carmen Eugenia Dávila, directora de Gestarsalud (vocera de las del régimen subsidiado), y a Paula Acosta, presidenta de Acemi (agrupa a las EPS del régimen contributivo), para desmenuzar los riesgos y peligros que traería la reforma para el sector salud. Entre ellos, además, están el desfinanciamiento y la politización del sistema.

Incluso, advirtieron sobre el miedo colectivo que desde ya comienza a crecer en un panorama lleno de riesgos e incertidumbre en el que, a fin de cuentas, las EPS no fueron escuchadas.

Según las directoras, la reforma no construye sobre lo construido, como lo prometió Petro, sino que destruye para generar un sistema de salud peligroso. Esto, agregan, golpea directamente a los pacientes y usuarios.

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“La reforma que se presentó es mucho peor de lo que se había filtrado”: Gestarsalud

¿Qué impacto podría generar la reforma a la salud que presentó el Gobierno Nacional a las entidades promotoras de salud?

“Se está estatizando el sistema de salud. Es un monopolio de la operación que restringe el principio de la libre elección de los usuarios. Para el ciudadano transitar en este nuevo modelo de Servicio Nacional de Salud va a ser muy complicado. Y esto nos va a llevar a que ninguna plata alcance, las finanzas van a colapsar y no es tan sencillo como decir que el presupuesto general lo reponga porque los recursos son limitados. Todo esto en mi concepto viola el derecho a la Seguridad Social que tenemos todos los colombianos por el artículo 48 de la ley 100 y que es un derecho irrenunciable. Y, además de todo, no soluciona ninguno de los problemas que han sido diagnosticados”.

Ustedes sostuvieron un par de reuniones con la ministra Corcho. ¿Creen, como gremio de las EPS, que fueron escuchados y esos planteamientos que habían hecho se vieron reflejados en el texto de la reforma?

“Hablamos relativamente poco de la reforma, porque en ese momento se decía que el texto no estaba listo y había mucha especulación sobre el definitivo. Ahora, que ya conocemos el oficial, realmente es mucho peor de lo que se había filtrado. Encontramos cosas muy riesgosas. Esa frase de ‘construir sobre lo construido’ ahora es todo lo contrario, se está destruyendo lo construido”.

¿Cuál de todas las cosas riesgosas usted considera que es la peor o la más regresiva de todas?

“El tema es que está cambiando el modelo totalmente. Entonces, tenemos una cosa que funciona, pero que tiene problemas que todos sabemos que hay que corregir y lo que se está planteando es un borrón y cuenta nueva, es arrancar otro sistema de salud con otra filosofía, un modelo estatizado donde hay una serie de instituciones que van a administrar los recursos y un manejo totalmente monopólico y estatizado”.

 

¿Qué opina sobre el capítulo que habla sobre crear un régimen para mejorar las condiciones contractuales y laborales de los profesionales de la salud?

“Estamos totalmente de acuerdo. A la gente hay que remunerarla de acuerdo a las normas que rigen a todos los empleados que tienen estabilidad. Desde el punto de vista fiscal, pues, ojalá haya la plata. Es que no puede haber plata para tanta cosa que se quiere hacer”.

“Este proyecto genera un riesgo de ineficiencia y pérdida de recursos”: Acemi

¿De qué manera cree que el texto final, como está planteado, va a impactar a las entidades promotoras de salud?

“Desaparecen las EPS. Desaparece el sistema actual que teníamos creado en el marco de los sistemas de seguridad social y crea un nuevo sistema de salud, en donde la participación de los privados está restringida a la prestación de servicios. Deja el nombre de EPS, pero se le dan funciones que son completamente diferentes”.

¿Fueron escuchados en cuanto a lo que se habló con la ministra Corcho y el resultado del texto final con respecto a las EPS?

“Pues no. Agradecemos el espacio que se abrió con el presidente, pero claramente no vemos reflejada la propuesta en el modelo. Es un debate que apenas comienza”.

Del articulado en general, ¿qué opinión o qué sensaciones les queda a ustedes como gremio de las EPS acerca del financiamiento de este nuevo modelo que se está planteando?

“Tenemos muchas preguntas y preocupaciones. No hay fuentes nuevas de financiación que se hayan identificado. Desde nuestra perspectiva se complejiza la estructura financiera. Esto genera un riesgo de ineficiencia y pérdida de recursos en cualquier parte de la cadena. La Adres manejará temporalmente los recursos mientras las entidades territoriales asumen gradualmente la competencia de la gestión directa de estos. Realmente lo que es el plan a mediano y largo plazo es darle nuevamente el manejo de los recursos a alcaldes y gobernadores a través de los fondos municipales y departamentales”.

¿Cuál será el impacto en los pacientes?

“Esa es la preocupación más grande que tenemos. Es la fragmentación en la organización de la red. Es decir, hacen la atención primaria, pero algún día un paciente va a necesitar que le hagan una operación a corazón abierto o algo que requiere mayor nivel de complejidad. Para eso hay que organizar una red donde las entidades territoriales tienen que coordinar con cinco instancias diferentes, y mientras todos se ponen de acuerdo, eso puede limitar el acceso a muchas de esas prestaciones. Esta reforma ha generado mucha incertidumbre”.

Gestarsalud advirtió alto riesgo de corrupción en la reforma a la salud

La agremiación advirtió que con el proyecto el Estado, a través del Adres, “esos dineros, sagrados, se asignarían a unos fondos regionales que pagarían de forma directa por las atenciones”.

Además se crearía un monopolio público. “La gente ya no podría elegir quién lo afilia y no se sabe con claridad quién va a responder por usted y sus necesidades”, advirtió.

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