De acuerdo con un análisis hecho por La República, para evitar caer en estas trampas se recomienda buscar información de la empresa a la que va a aspirar ya sea por Internet o en su sitio físico. Además, mirar si en la oferta hay datos de contacto de la compañía.

“La globalización y masividad del internet permite que la mayoría de las empresas locales e internacionales figuren con páginas de acceso web, lo cual permite esta tarea de verificación”, aseguró Isabella Gandini, miembro de la firma de abogados Norton Rose Fulbright, al diario económico.

La otra recomendación es no pagar por acceder a las ofertas de trabajo a menos que sean portales muy reconocidos en el campo. Si la vacante que encuentra por Internet le pide dinero, dude de inmediato.

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Ante el escenario de una oferta fraudulenta, “debe acudir al Ministerio de Trabajo para denunciar al oferente, o en caso de un fraude más elaborado, directamente ante la Fiscalía General de la Nación”, señaló Gandini al medio mencionado.

Portafolio también da otros consejos para no caer en estas ofertas falsas. El primero es digitar en Google el número de teléfono o el correo electrónico que debe estar en la oferta para saber si hubo búsquedas de vacantes anteriormente.

Por último, recomienda revisar el Linkedin si la compañía a la que se está postulando tiene registro. Por lo general, las empresas aparecen en esta red social empresarial por temas de difusión de contenido a diferentes firmas con el fin de generar algún tipo de contacto o negocio.