Con un dólar que en cualquier momento vuelve a dispararse alrededor de los $5.000 en Colombia y una inflación alta, de 12,22% anual en octubre ¿qué hacer?

Se acerca el final de 2022 y los analistas e inversionistas están atentos a las diferentes noticias que pueden hacer que los mercados internacionales suban o bajen estrepitosamente, dejando en el camino varias consecuencias, tanto para los que se preparan adecuadamente, como los que se encuentran con sorpresas.

(Vea también: Abecé para invertir en la Bolsa de Valores, pese al dólar y la inflación por las nubes)

Este 2022 ha dado para todo. Por un lado, los efectos de la pandemia del Covid-19 siguen viéndose reflejados en cadenas de suministro y comercio internacional, la inflación general que golpea las economías principales del mundo ahora está trasladándose a los países en desarrollo y las economías subdesarrolladas. El dólar se fortalece a medida que el euro pierde la paridad con la divisa estadounidense y los bancos centrales del mundo ven con detalle lo que ocurre con China y Estados Unidos, con sus decisiones en tasa de interés. Además, Rusia continúa su guerra contra Ucrania y la comunidad internacional no sabe en qué momento llegará la gota que derramará el vaso.

Mientras tanto en Colombia la situación empeora. Las empresas exportadoras e importadoras están preocupadas con el dólar a $5.000 pese a los productos de cobertura de tasa de cambio que hay en el mercado. Exportadores ven que sus ganancias no crecen pues mucha cosas de su inventario para producir las traen de afuera y los importadores sienten fuerte el alza del dólar en sus costos de producción.

De otro lado, la inflación crece en Colombia y con ello, los consumidores temen que el 2023 será peor. El dinero ‘no alcanza’ para sus necesidades y además, con el dólar al alza, se crea el efecto psicológico de ‘empobrecimiento’. Las cuentas no están claras para el común de las personas y muchos se preguntan ahora ¿Hay oportunidades para invertir?

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La compañía FiduOccidente diseñó 5 puntos clave que deben tener las personas a la hora de invertir:

#1. ¿Es mejor ahorrar o invertir? El ahorro y la inversión tienen propósitos diferentes. Por ello, la decisión depende de lo que la persona esté buscando. El ahorro, al guardarse en productos financieros que permiten acceder a este de inmediato o en el corto y mediano plazo, sirve para cubrir emergencias o cumplir algunas metas específicas que se planteen. La inversión busca, por su parte, que el dinero produzca rendimientos a largo plazo. En todo caso, tener ahorros y/o inversiones para el futuro, no solo es necesario, sino que brinda seguridad, bienestar y permite mantener fondos en caso de que sea necesario utilizarlos.

#2. ¿Qué se debe tener en cuenta a la hora de invertir? Es importante que quien va a invertir defina su perfil de riesgo, las metas que construirá con su inversión en el futuro y la posibilidad de tener un ahorro adicional que permita cubrir posibles acontecimientos o imprevistos. Esto último teniendo en cuenta que no en todas las inversiones es posible disponer de inmediato del dinero. Asimismo, lo más recomendado es asesorarse de un profesional debidamente certificado que pueda dar sugerencias acordes con sus necesidades.

#3. ¿Cuál es el mejor perfil de riesgo? No hay perfiles de riesgo mejores o peores sino adecuados a las características de cada inversionista. Para el caso de mecanismos como los Fondos de Inversión Colectiva, existen los conservadores o bajos, los de riesgo moderado y los de riesgo alto. Cada uno de estos se adapta según el enfoque que se le quiera dar al dinero. Es bien sabido que en el largo plazo la probabilidad de mayores rendimientos aumenta conforme con el nivel de riesgo que se asume. Un sondeo de FiduOccidente arrojó que las personas en Colombia tienen en su gran mayoría (96%) perfiles de riesgo bajos y moderados, y tal solo el 4% riesgo alto.

#4. ¿Es importante tener un objetivo definido? Las inversiones son un vehículo para cumplir una meta. En este sentido, es fundamental tener claro el objetivo que se persigue para, con base en este, definir el fondo de inversión o la opción más conveniente. De hecho, según datos de FiduOccidente, el 40% de las personas no tienen un objetivo definido, solo buscan tener un soporte a futuro; el 41% quieren comprar vivienda, hacer negocios o acumular un capital para su vejez; y el 19% restante busca comprar un carro, iniciar algún estudio, viajar o inclusive pagar impuestos. El objetivo se convierte en un impulso para llegar a esa meta más rápido.

#5. ¿El plazo en el que se van a usar los recursos invertidos es relevante? ¡Definitivamente! Al dinero destinado para las inversiones no siempre se puede acceder de forma inmediata, depende del tipo de activo en el que se invierta. Un ejemplo claro son los fondos entre los cuales existen cerrados, que son aquellos en los que solamente se puede entrar o salir en determinados momentos; y los abiertos, en los cuales hay acceso a los recursos en cualquier momento. Por ello, es necesario tener en cuenta el plazo en el cual se quiere disponer del dinero. Esta decisión depende de las necesidades y expectativas de cada persona. Lo recomendable es buscar la mejor opción de la mano de un asesor experto.