Han pasado tres generaciones distintas y 14.644 días para que Deportes Tolima pueda enfrentarse cara a cara a su destino. Y tener la posibilidad de reescribir su historia en la mítica Copa Libertadores de América. Y así permitirle a quienes crecieron con los relatos de aquel inolvidable 1982, e imaginaron las gambetas y los goles del inigualable Víctor Hugo, ser los protagonistas de sus propios recuerdos.

Los ‘pijaos’, contra todos los vaticinios posibles, que lo daban por ‘muerto’ antes de la definitiva fecha de la fase de grupos, están únicamente a un punto de romper la cruel estadística en la competición y darle la primera gran alegría a su sufrida parcial en la escena continental. La cual se esfumó en 1983, 2004, 2007, 2011, 2013, 2019 y 2020, cuando la ilusión de hincha fue más que la voluntad y el fútbol.

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Llegó el día en que los anhelos se pueden transformar en realidades. En el que más allá del dinero, la sed de éxito se convierte en motivación suficiente para marcar su propio sendero.

El estadio Mineirao de Belo Horizonte, el mismo en el que hace ya ocho años, aquel 14 de junio de 2014, la Selección Colombia inició con éxito su camino en la Copa del Mundo de la FIFA, tras la goleada (3-0) ante su similar de Grecia, albergará el sueño ‘musical’. Un positivo precedente para el balompié nacional, ávido de romper el ‘maleficio’ en el torneo, con cuatro años de duros fracasos.

Con los ojos y el corazón en esta cancha, pero los oídos en la mitad del mundo, el ‘vinotinto y oro’ saldrá a jugarse, literalmente, su honor. Colombia se quedó pequeña para un onceno que ya demostró de lo que es capaz en el FPC y necesita nuevos desafíos para crecer. Al todo o nada, a ‘Santa Rosa o al charco’, la ‘tribu’ saldrá a librar la más dura de sus batallas por Sudamérica, ante todo un ‘Goliat’.

El ‘cacique’ está listo para llevar con su sapiencia a sus ‘indios’ a la conquista de nuevos territorios. Y a vencer sus propios miedos, pues una vez más irá por un viejo sueño de su pueblo. Quince años después, el ibaguereño Hernán Torres Oliveros tendrá su propia revancha; la oportunidad de seguir remarcando con flechas de oro su legado en la comarca, en la que su estampa se ha hecho inmortal.

Con bajas

Aunque en planilla apuntó por la presencia de 20 elementos, el cuadro ‘pijao’ tendrá sensibles ausencias. Son ellas las del volante de marca Bryan Rovira, afectado en su estado de salud; al igual que la del delantero Juan Fernando Caicedo, quien tiene una contractura en su tobillo izquierdo. A ellos se suman jugadores como Juan David Ríos y Luis Miranda, también al margen por lesiones.

A ellos se suma el volante peruano Raziel García, quien ya partió a la concentración de su país para jugarse el cupo mundialista a Catar, aunque lo más probable es que su ciclo, que no llenó la expectativas de la dirigencia y cuerpo técnico, haya llegado a su fin. Y el zaguero Sergio Andrés Mosquera tampoco entró en el listado, toda vez que su lesión de recto anterior se habría recrudecido.

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Una probable nómina de los ‘musicales’ tendría al ecuatoriano Alexander Domínguez en el arco; Jonathan Marulanda, Julián Quiñones, José Moya y Junior Hernández en defensa; Rodrigo Ureña y Cristian Trujillo en funciones de marca; Ánderson Plata, Daniel Cataño y Andrés Ibargüen en tridente creativo, y en punta la gran duda: Michael Rangel, o el paraguayo Gustavo Adrián Ramírez.

En el banco, en tanto, estarían el golero William Cuesta, el defensa Eduar Caicedo, los laterales Léider Riascos y Jeison Angulo, los mediocampistas Yohandry Orozco y Fabián Mosquera, los habilidosos extremos Álvaro Meléndez y Jeison Lucumí, y el descartado entre Rangel y Ramírez. Una nómina modesta en el contexto sudamericano, pero que se muestra equilibrada pese a las ausencias.

El rival

Por su parte, Atlético -ya clasificado a la siguiente fase- saldrá a defender el invicto de 18 choques sin perder en la competición, con 11 victorias y siete empates. Es, a la fecha, la racha exitosa más prolongada de club alguno en su predio, en los más de 60 años de historia de la Copa. Un triunfo visitante ante el equipo de Hulk y ‘Nacho’ Fernández sería un ‘batacazo’ de proporciones descomunales.

En cuanto a ausencias, Mineiro -líder de la llave con 11 unidades– no tendrá al defensa central uruguayo Diego Godín y al mediapunta chileno Eduardo Vargas, ambos por lesión. Sin duda dos jugadores de respeto a nivel sudamericano, aunque al parecer serán suplidos por otros grandes talentos de una divisa que también pelea el Brasileirao, ubicándose en el cuarto lugar del tablero de posiciones.

En síntesis

El árbitro argentino Patricio Loustau será el encargado de impartir justicia en este trascendental compromiso, aunque los antecedentes no sean favorables en cuanto a lo que se refiere a dirigirle a los de Ibagué. Llegará, sin lugar a dudas, condicionado por su mala actuación en el cotejo del pasado 4 de mayo, cuando condicionó el accionar de los locales en el triunfo (1-0) ante Independiente del Valle.

El elenco de Ibagué, como antecedente positivo, viene de ganar en su más reciente visita a Brasil; justamente al América Mineiro el 27 de abril (2-3), en su primera celebración en el país de la Samba, tras ocho presentaciones por Conmebol. En la novena visita, de su novena participación en la Copa, saldrá por toda una hazaña, ante un contrincante que es un gran favorito para disputar el título.

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Las apuestan pagan por una victoria foránea casi 12 veces lo depositado, y 5 en caso de una igualdad. Con todo en su contra, a Tolima no le queda de otra que salir por un resultado histórico, o correrán el serio riesgo de quedarse al margen de la competición una vez más. Lo cual, a juzgar por su millonaria inversión, sería un duro revés para un proyecto deportivo.

En caso de lograr el objetivo, el conjunto tolimense se embolsillará 1.050.000 dólares, como incentivo a los 16 elencos que competirán en esta fase del torneo. Con la posibilidad, si el fútbol lo acompaña, de seguir escalando lugares en la competición, en una temporada en la que rompió el mercado a nivel nacional para hacer una digna representación del rentado criollo en el continente.