Los dos primeros jugadores que partieron antes de iniciar el campeonato, fueron Nicolás Giraldo y Juan David Pérez, ambos regresaron al América de Cali, club del cual son propiedad, y estaban en condición de préstamo en Manizales. Sin duda, la solicitud del regreso fue debido a la imposibilidad de contratar para el conjunto rojo, por la sanción que acarrea.

Sobre el inicio de la Liga, el equipo ‘blanco blanco’ empezó a informar las otras bajas. Primero, la de Marcelino Carreazo, quien, a pesar de tener contrato hasta enero de 2023, no aceptó las ofertas de renovación que le ofreció la institución y tras el desacuerdo entre las partes, se decidió no contar más con él; sin embargo, sigue ligado al club y entrena por separado. Según Pipe Sierra, periodista deportivo, rechazó una oferta para ir al Junior de Barranquilla, porque su deseo es ir al extranjero.

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Otra baja es la del volante de 25 años, Sebastián Felipe Guzmán, que luego de cinco temporadas en Once Caldas, se marcha al futbol de Portugal, para jugar en el C.F Strela Da Amadora, equipo de la segunda división de ese país y que es de la zona metropolitana de Lisboa, la capital. El cuadro blanco se guarda un porcentaje de los derechos del jugador, para una futura venta.

Otro jugador que partió y, recientemente, fue Nelson Quiñones, quien se marchó al Houston Dynamo de la MLS, cedido hasta junio de 2023 con una opción de compra del 75 % de sus derechos, por 1.8 millones de dólares.

A esta misma liga, pero al Minnesota United, se va un hombre que fue importante en la campaña anterior, y que sumaba cinco temporadas con el ‘albo’, Ménder García. La primera opción era al fútbol de Suecia, pero este negocio de cayó. Su traspaso definitivo a la MLS, ronda por los 2 millones de dólares. Once Caldas se queda con el 25 % del jugador.

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En último lugar, está la transferencia que más tomó por sorpresa a todos; Robert Mejía, que tuvo buenas actuaciones en los últimos dos juegos, frente a Águilas y Medellín por Liga, se va cedido con opción de compra, al Giresunspor de la Super Liga de Turquía.

Raro no es en Once Caldas que este tipo de cosas sucedan. Negocios por jugadores sobre la hora, o sobre la marcha, como está sucediendo, y esto sin lugar a dudas, afecta el rendimiento del equipo, reduciendo mucho la nómina y la posibilidad al técnico de tener alternativas. Se queda corta la nómina, y eso es preocupante para más adelante, cuando las lesiones, los bajos rendimientos y las suspensiones empiecen a aparecer, como sucedió el semestre anterior.  A remar contra la corriente otra vez.