En diciembre de 2020, cuando su capítulo en el Atlético Bucaramanga había terminado, Jaír Palacios se preparaba par irse al Deportes Tolima, pero pasó por Cali y en una noche su vida cambió.
El lateral derecho se fue a un apartamento con varias personas y empezó una noche de excesos, como las que acostumbraba a tener desde que era muy joven. Incluso, estando en Millonarios, el tuvo esos problemas y contó cómo lo quisieron ayudar, aunque no pudieron lograrlo.
Aquella noche, le contó Jaír Palacios a Gol Caracol, se lanzó de un cuarto piso. “Las personas con las que estaba en ese momento, me dijeron que yo había empezado a actuar raro y me tiré, pensando que ellas me iban a hacer daño. Estaba en un trance de pánico y me lancé. No sé cómo estoy vivo porque yo caí en pavimento. Cuando me levanto de la clínica, el hueso de la cadera estaba hacia arriba, casi que se sale de la piel. En ese momento, me vi y dije: ¿Qué hice con mi vida?”. Fue en aquel momento que varios de sus excompañeros y futbolistas pedían una oración por él.
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El futbolista no recuerda qué fue lo que pasó esa noche. “Me levanté en una clínica, le digo a mi esposa que qué hago ahí y ella me dice me había lanzado de un cuarto piso y no lo podía creer. Fue tanta la droga que tenía en mi sangre y cuerpo, que ni me acordaba qué había hecho, no era consciente de nada”, dijo.
Para aquel momento tenía 30 años y pensaba en continuar jugando fútbol y por eso tomó decisiones equivocadas: “A los cinco días de operado salí en muletas caminando, paré un taxi y me fui, pero estaba muy delicado y no lo quería entender, hasta el cirujano me dijo que todavía no podía caminar. Eso no me iba a cicatrizar, no le hice caso y seguí”.
Bucaramanga y Acolfutpro fueron fundamentales en esa recuperación. A pesar de que los ‘leopardos’ ya no tenían ninguna responsabilidad contractual con él, lo acompañaron y “se hicieron cargo de otros gastos cuando ni les correspondí”, dijo Palacios y añadió: “Entre ellos me ayudaron porque la cirugía siempre fue costosa”.
A pesar de ese hecho que casi le cuesta la vida, Jair Palacios no cambió y su lucha para no consumir drogas se perdía, a tal punto que tuvo otro hecho que casi lo lleva a la muerte. “Después de lanzarme del cuarto piso, tuve otra caída, que esa no la sabe nadie. Ya me había recuperado. Tras seis meses, ya podía andar bien, común y corriente, caminando normal y fue cuando llegó otro tropiezo. Estaba cumpliendo años y en la fiesta me enfiesté. Ese día estuve bajo el efecto de muchas drogas, con sentimientos encontrados ya que no estaba jugando fútbol y al amanecer la gente me dice que yo me le estaba tirando a los carros. Mi esposa estaba llorando, no sé qué locura hice”.
¿Qué drogas consumió Jaír Palacios, exjugador de Millonarios?
Su vida futbolística tuvo su mejor momento en el azul de la capital, pero siempre estuvo rodeada de vicios. Según dijo, consumió todo tipo de sustancias: “Marihuana, éxtasis, tusi, cocaína, marihuana, licor. Junté todo lo que va en contra de un deportista de alto rendimiento: la noche, las mujeres, las drogas, el licor y el casino. Y eso lo hacía casi que a diario”.
Cómo está Jaír Palacios actualmente
El vallecaucano, a sus 32 años, está viviendo en Estados Unidos con su esposa, con quien también se dijo que había tenido problemas en un centro comercial. Jaír le agradece a ella por no dejarlo solo.
“A mí esposa le digo que la admiro mucho porque para haber estado con una persona así, eso es mucho amor el que me ha demostrado. A ella y mis dos hijas, las admiro mucho. Solo tengo palabras de agradecimiento para ellas porque hoy están muy orgullosas de mí, del hombre que ahora soy y en el que me convertí. Ellas están muy contentas de ver al Jaír de hoy, que yo tampoco me las creo. Ahora, cómo tomé esta decisión de cambiar: después de que pasó eso, vi llorando mucho a mi abuela y a mi esposa, y cuando vi en las mismas a una de mis hijas y le pregunto que qué pasaba, me decía que no quería que saliera más. Fue cuando me dijeron que me viniera para Estados Unidos a estar con mi familia, que siempre me apoya. Ya tengo charlas con un psicólogo y el pastor César que me ayudan mucho”.
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Además de esas personas que siempre lo han acompañado, el exfutbolista le agradece a varias personas que estuvieron dándole consejos para que dejara esos vicios e hiciera un gran cambio en su vida.
“Dicen que no todos los amigos están en las malas, pero yo sí los tuve y los sigo teniendo, como Duvier Riascos, Jhon Duque, Harold Santiago Mosquera, el apoyo de ellos fue fundamental. Y una persona importante fue Hernando Parra (actual dirigente en Atlético Bucaramanga), que es mi otro papá, como le decía. Hoy por hoy siguen conmigo”, recordó.
Así luce actualmente, según una de las últimas imágenes que publicó en sus redes sociales:
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