El alemán ha sido considerado uno de los mejores técnicos del mundo en los últimos años. Empezó en un equipo no tan reconocido en su país, pero dio un salto de calidad tras su novedosa forma de entrenar. Por cosas de la vida llevó a un colombiano a Alemania y no se equivocó al poner los ojos sobre él.
Cada vez que le han preguntado a Klopp sobre Luis Díaz se le ilumina la cara y sonríe. Hasta ahora son dos partidos con el Liverpool y el entrenador no se ha ahorrado elogios. Sin embargo, este no es el primer colombiano al que ha dirigido y que pidió fichar para uno de sus equipos.
Elkin Soto alcanzó la gloria a los 23 años cuando en 2004 ganó la Copa Libertadores con el Once Caldas. El manizaleño había debutado con el equipo de su tierra en 1999 y en 2003 fue campeón de la Liga Colombiana. Además, sus buenas actuaciones lo llevaron a ser convocado a varios partidos de la Selección Colombia en la Eliminatoria para el Mundial de Alemania. Durante el 2006 tuvo su primera experiencia internacional jugando en el Barcelona de Ecuador. (Vea también: “¿Tan sonriente en un ‘bobito’?”: Klopp, sorprendido con los entrenamientos de Luis Díaz).
A final de ese año se encontraba Johnny Báez en Ecuador, un representante de jugadores que es mitad español y mitad alemán. Báez es casado con una mujer de Guayaquil y recibió una llamada de su amigo Jürgen Klopp diciéndole que necesitaba un zurdo sudamericano para su equipo. Klopp había sido futbolista del Mainz 05 de 1989 a 2001 y asumió las riendas del equipo apenas se retiró cuando el club estaba en crisis y a punto de descender a la tercera división.
En la temporada 2003–2004 ascendió al Maniz a la Bundesliga y su estilo comenzó a llamar la atención. A final de 2006 el equipo era último y luchaba por no descender, por eso Klopp buscaba incorporaciones en el mercado de invierno. Báez averiguó en Ecuador y le recomendaron a Elkin Soto del Barcelona, el representante del colombiano le dio un video a Báez y este se lo dio a su amigo alemán.
Klopp aprobó el fichaje de Soto, aunque hubo ciertos inconvenientes con el Once Caldas que reclamaba una indemnización. “Soto es un mediocampista muy peligroso que hemos visto en varias ocasiones, y con él nuestras oportunidades en el área ofensiva son mucho mayores”, dijo Klopp cuando el caldense llegó en enero de 2007. Por el lío de la transferencia pudo debutar hasta el 10 de febrero cuando golearon 4 – 1 al Energie Cottbus. (Vea también: “El quinto Beatle”: The Athletic, de Inglaterra, se riega en elogios hacia Luis Díaz).
Quince días después Soto tuvo una lesión en la rodilla que lo dejaría 2 meses por fuera y Klopp dijo: “Es trágico. Él se había adaptado muy bien después de todas las complicaciones que hubo con su traspaso cuando tuvo que esperar durante semanas la carta de libertad de la FIFA. Nos ocuparemos de él intensivamente para que no caiga en un vacío anímico”. Estaba claro que Soto ya le había dejado muy buenas impresiones a su entrenador.
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Al final el Mainz terminaría descendiendo, pero de inmediato en la temporada 2007 – 2008 volvió a retornar a la máxima categoría de la mano de Klopp. Soto se fue metiendo tanto en el grupo que se convirtió en una especie de “hermano mayor”, así lo llamaban. Luego del ascenso en 2008, Klopp se marchó al Borussia Dortmund dejando un legado en el Mainz y se recuerda lo que alguna vez dijo del colombiano: “Una cosa está clara: Elkin Soto es uno de los jugadores más excepcionales de la Bundesliga”.
Por su parte, Solo permaneció hasta el 2016 en el club y es uno de los jugadores más queridos. Sufrió una grave lesión en 2015 y se pensaba que había terminado su carrera futbolística, pero no fue así. Regresó al Once Caldas y ha vuelto a Alemania a partidos de exhibición y homenaje del Mainz. Con Klopp sigue manteniendo relación e incluso Soto reveló que luego de una clasificación del Liverpool a la final de la Champions League habló con Klopp.
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