La permanencia de Fernando Jaramillo como presidente de la División Mayor del Fútbol Colombiano (Dimayor) está pendiendo de un hilo. Con el pasar de los días, más clubes se suman a la posición de exigir la renuncia del directivo, tras dos años de gestión, en los que el balompié rentado se ha visto envuelto en un sinfín de escándalos, que han hecho la continuidad del directivo insostenible.

A la petición de elencos como Patriotas y Santa Fe, se sumó este viernes la del Deportes Tolima, que a través de su presidente, César Camargo Serrano, dejó muy clara la postura del ‘Vinotinto y Oro’ con respecto a este tema. E invitó, de manera abierta, a que Jaramillo contemple la posibilidad de dar un paso al costado y dejar a disposición el cargo, para el cual fue elegido en la pandemia del COVID-19.

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El presidente interino del club, hijo del exsenador Gabriel Camargo Salamanca, y quien justamente fue uno de los aspirantes a llegar a la dignidad en el ente rector, fijó la decisión del conjunto de la ‘Tierra Firme’ de respaldar la salida del directivo; así como lo han exigido otras instituciones de renombre, que ven en el trabajo de Jaramillo -incluso- un retroceso con respecto a la situación de la entidad.

“Yo lo he dicho abiertamente: como persona no tengo reproche alguno, es un caballero y buena persona, y ha sido amigo personal desde hace muchísimos años. Pero esto se trata de una asociación, de un negocio, y una agremiación que, desafortunadamente, creemos hoy no está en mejores condiciones que hace dos o tres años”, expresó al ‘Combo Deportivo’ de Caracol Ibagué.

“Por eso consideramos prudente, por él, por la Dimayor y los equipos de fútbol que debe dar un paso al costado. Y nuestra invitación es que lo hagamos con altura, con decencia. Pero está claro: ninguno de nosotros puede decir que la Dimayor ha evolucionado; es más, simplemente estamos estancados”, remató Camargo Serrano a este medio radial, que generaron ‘ampolla’ a nivel nacional.

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Para el directivo, la invitación es a “solucionar el tema de la mejor manera”. Así pues, uno de los hoy por hoy ‘peso pesado’ del FPC también le bajó el ‘pulgar’ al directivo, al que -entre otras cosas- han cuestionado sus decisiones en favorecimiento de uno de los cuadros de la capital, lo que derivó, en junio pasado, a la renuncia del Comité de Disciplina del Campeonato y la Comisión Disciplinaria de Dimayor.

Por lo pronto, la única ‘cabeza’ que ha ‘rodado’ es la del gerente de la entidad: Vladimir Cantor, a quien la programación del partido entre América y Cortuluá en el Doce de Octubre, oficiando como local el equipo ‘Escarlata’, lo llevó a quedarse sin trabajo, debido a una clara violación de los principios de ‘Fair Play’. Este tema generó molestia entre algunos de los dirigentes, como César Guzmán.

“Los equipos son los que toman las decisiones sobre qué quieren y pienso que yo tengo que ser parte de la solución y no de los problemas […] El día que yo sea parte del problema, no debo estar acá. Respeto mucho a los 36 clubes. Las posiciones siempre han sido sanas”, dijo hace apenas tres días Jaramillo, con respecto a su continuidad como presidente de Dimayor.

Sin embargo, el nivel actual del arbitraje en Colombia, las polémicas decisiones en cuanto a sanciones para unos equipos, en detrimento de otros, los derechos de televisión, la ‘confección’ de los calendarios de las competencias y un sinfín de situaciones más tendrían contra las ‘cuerdas’ al directivo: quien pretende aferrarse a su cargo, al que llegó en reemplazo del cuestionado Jorge Enrique Vélez.